José Manuel Lara, 2006. 346 páginas. Excelente libro en el que Caballero Bonald hace una introducción que nos situa en los orígenes del flamenco, explica su evolución, analiza los palos y presenta algunos de los cantantes más famosos. Todo explicado de manera sencilla pero con rigor y bien documentado con una extensa bibliografía. Por otro lado están las maravillosas fotografías de Colita que son una delicia visual (se pueden buscar en internet, hay muchas) y que por la pena de no tenerlas me da rabia tener que devolver el libro a la biblioteca. Muy recomendable. Las primeras y vagas incursiones del flamenco en el terreno del folklore, y la misma confusión suscitada por algunos ávidos rastreadores de pintoresquismos, dio motivo a que ciertas canciones y aires bailables andaluces se asociasen con los gitanos, identificando también a estos por el consabido uso de vihuelas, bandurrias, violines, tiples, panderos, etc., que solían emplear los andaluces. Nada más erróneo, sin embargo. Aunque es cierto que los gitanos ejecutaron desde el siglo XVI, con el acompañamiento musical propio de la época, muy abundantes formas de bailes y canciones populares, no por ello hay que mezclar en absoluto esas actividades con las estrictamente flamencas. Dichas…

Símbol, 2007. 740 páginas. Trad. Miquel Cabal. Vladímir Arséniev fue un explorador y cartógrafo ruso que además de sus artículos científicos escribió unos cuantos libros sobre sus andanzas. De ellos los más famosos fueron los dos que se agrupan aquí (Por la región del Ussuri y Dersú Uzalá) por la figura que da título al libro y del que se hizo una película. Dersú era un cazador chino que vivía solo por el monte, dedicado a la caza. Al encontrarse con la expedición se unió a ella, salvando al autor en más de una ocasión de la muerte, aconsejándolo con su conocimiento de la taiga y sorprendiendo por sus dotes de observación. En el ejemplo que dejo al final se ve una muestra digna del mismísimo Sherlock Holmes. A partir de un rastro deduce que había dormido un trampero viejo que no se había decidido a cruzar el río. Explica el por qué de sus deducciones y cuando el autor le pregunta ¿Y cómo sabías que era viejo? Porque los jóvenes primero pisan con la punta y los viejos con el talón. Dersú se hace simpático no sólo por sus conocimientos, también por su modo de ser bondadoso y sin…

Después de su obra autobiográfica Piruetas la autora se va aquí al extremo opuesto: un mundo futurista y fantástico en el que las naves espaciales tienen la forma y los movimientos de peces, las protagonistas se dedican a restaurar edificios que flotan en el espacio y el mundo parece un enorme matriarcado en el que no se ve ningún hombre. Me ha gustado mucho ese mundo que dibuja, a medio camino entre lo real y lo fantástico, sobre el que apenas se dice nada pero constituye un telón de fondo muy atractivo. También las historias de amor, compañerismo y sororidad. El encaje de las dos, sin embargo, me parece que chirría algo en las costuras. Recomendable.

Los que tenemos una cierta edad al escuchar algunas canciones viajamos de inmediato a nuestra juventud y nos golpea una oleada de nostalgia que nos hace lagrimear y sonreír al mismo tiempo. Algo así le pasa a Dawson, fan de Queen desde pequeño. Sus canciones le han acompañado en todos los momentos de su vida, porque Queen tiene canciones para todos los momentos. El álbum es una autobiografía con la banda sonora de uno de los grupos de rock más famosos de todos los tiempos. Empatizo con el autor y me emociono, como él, por el poder evocador de la música. Curiosamente y de manera algo lateral -puesto que yo no soy especialmente fan del grupo- también Freddy me trae un recuerdo importante. Estando en la estación de autobuses de Logroño con mi novia de entonces nos enteramos de la muerte de Freddie Mercury. Mi novia me dijo ‘Ya empiezan a morirse nuestros referentes. Ya somos adultos.’ Recomendable.

En la exploración de planetas se suelen llevar Matabots como guardaespaldas, como protección para posibles peligros. En una de estas misiones se presentará una serie de problemas de las que se podrán escapar gracias a que el Matabot de la expedición, además de narrarnos la aventura en primera persona, ha hackeado su sistema y es inmune a órdenes externas. La obra, en sí, no es nada del otro mundo. Pero está tan bien construida, sin fisuras, con su grado exacto de elementos de ciencia ficción, sin fliparse, que me ha resultado deliciosa. Supongo que el matabot protagonista continuará sus aventuras y yo querré leerlas. Recomendable. Los matabots no tienen permitido viajar con los humanos, así que debía concederme permiso en voz alta. Con el módulo de control roto nada podía detenerme, pero era bastante importante no dejar que nadie, sobre todo la gente que me había contratado, supiera que iba por libre. Era casi igual de importante que evitar la destrucción de mis componentes orgánicos o impedir que me cortaran en pedazos para aprovechar las piezas. Subí a Bharadwaj por la rampa hasta la cabina, donde Overse y Ratthi se afanaban en desenganchar unos asientos para hacer sitio. Se habían…