Friedrich Schiller. Els bandits.
Teatro / abril 3, 2006

Institut del Teatre de la Diputacio de Barcelona, 1996. Tit. Original: Die Räuber. Trad. Feliu Formosa. 177 páginas. 16 personajes. 15 hombres y 1 mujer. Con hermanos como estos… Ya comentaba en esta entrada que no soy admirador de Schiller. Pero no me gusta descartar a un escritor por una o dos obras; al fin y al cabo hasta mis escritores preferidos tienen obras que no me gustan. Maximiliano, conde de Moor, tiene dos hijos. Karl es un bala perdida y Franz es el fiel hijo que ha quedado a su lado. Pero también es una víbora que malmete a su padre contra Karl con funestas consecuencias: Karl se hace bandido y su padre se muere del disgusto. Ya solo le queda conquistar a la bella Amalia… Schiller la escribió con sólo 19 años y tiene lo bueno y lo malo de una primera obra. El drama es más drama y la historia anda un poco a saltos. Pero sigue sin convencerme. Para hacer bueno el dicho de que no hay libro malo, destacar un par de frases: Para hacer un hombre honrado, basta con cualquier imbécil, pero para hacer un bándido hay que tener cerebro Peor que la muerte…

Friedrich Schiller. Maria Estuard.
Teatro / octubre 18, 2005

Institut del teatre, 1995. Biblioteca teatral. 200 páginas. Tit. Or. Maria Stuart. Trad. Feliu Formosa. 13 personajes. 9 hombres y 4 mujeres. Drama monárquico Friedich Schiller, de quien podemos encontrar un buen artículo en la Wikipedia, conforma, junto a Goethe, el periodo clásico de la literatura alemana. Es autor de obras tan famosas como ‘Los bandidos’, ‘Don Carlos’, ‘Guillermo Tell’, la obra que nos ocupa, y de la letra del famoso Himno a la alegría. Es también un autor con el que un servidor no puede. Cuando leí Los bandidos me pareció bastante aburrida. Guillermo Tell me decepcionó. No escarmentado todavía emprendí la lectura de esta María Estuardo que ha pasado por mi caletre sin pena ni gloria. No estamos en la misma onda. La obra nos narra los últimos días de María Estuardo, una mujer de armas tomar con mucho mundo a sus espaldas, prisionera de Isabel I, la ‘reina virgen’. Dos personalidades fuertes y totalmente opuestas; católica una, protestante la otra. La primera con fama de ligera de cascos, la segunda de frígida. El texto se centra más en los personajes que en el contexto político, y se recrea en el enfrentamiento entre las dos maneras de ver…