Edgardo Dobry. El parasimpático.

marzo 17, 2022

Edgardo Dobry, El parasimpático
Club Editor, 2021. 108 páginas.

Ya he comentado por aquí que llegué hasta este autor porque viví en el mismo piso que él en la calle Avinyó. Todavía me sorprende la casualidad de que un lector aterrice en la casa que acaba de abandonar un escritor.

Divididos en dos partes, Peso neto, más poético en ocasiones con aire de haiku y Como todo, poemas más cotidianos, del día a día, casi prosa en ocasiones. Acaba con un requiem de su amigo J.B.

Me ha gustado más la primera parte y muchos versos. El que aparece en la contraportada:

¿Por qué lloras?¿No ves que estoy
pelando remolachas?Pero es la cebolla
lo que hace llorar, mami. Ah, cuando
estás muerta también te hace
llorar la remolacha.

Dejo como muestra de la primera parte un poema basado en el ADN y de la segunda otro con sabor metálico.

Bueno


Lo barroco

marginaba en un librillo hermético

Alma es lo que pensamos sobre el cuerpo
—del lado del mango, el pensamiento:
lo pensado en lo hondo del sartén.

Serenidad surge al creer que el cuerpo
razona igual y forma una tripleta:
cuando piensa en secreto —secreciones,

cuando piensa preciso —concreciones
(cuando piensa en informar —hormona).
Después se entrega al ADN, al Adonis.


Persistencia

Las máquinas que extraen el subsuelo
picotean como gallinas cuerdas

y cuando llega la mañana huele a orden.
Temporada alta de las supersticiones:
cuervos y ciervos husmean el peligro

tras la membrana de azar que los divide.

Octubre y noviembre se fueron en cosas
poco memorables y en estar pendientes d
e asuntos de urgencia intrascendente.
El corazón fue vendimiado en septiembre

y ahora un mosto con sabor
a miedo debajo de los cables.

No hay comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.