DVD ediciones, 1999. 151 páginas.
Recordando el momento
Suelo visitar el blog de Magda Bandera que descubrí, creo, a través del de Francisco Herrera. Periodista, de mi misma quinta, me interesan los temas que trata y me gusta como escribe. En un post comentó que tenía ejemplares de este libro y le pregunté por la posibilidad de comprarlo. Ni corta ni perezosa me mandó un ejemplar ‘gratis total’ y me pidió que no hiciera reseña. Como soy un desagradecido, aquí tienen el comentario.
«39 veces reune las historias de 39 jóvenes que cuentan en voz alta y sin tapujos como perdieron la virginidad». Así reza la solapa del libro y así es; con una leve elaboración periodística nos asomaremos a ese momento tan especial que es ‘la primera vez’. Hay de todo; historias tiernas, sórdidas, ridículas, nerviosas. Pero todas sinceras. Sorprende la mucha inexperiencia y el miedo; uno creía que habíamos avanzado en educación.
Acostumbrado como estoy a la ficción literaria, me ha sorprendido el verismo de las declaraciones ‘en crudo’. La realidad de las historias ha conseguido enternecerme más de una vez. Y el tema me ha hecho recordar como fue, para mí, la primera vez. Ay, la nostalgia. Si por una casualidad lo encuentran, no lo duden; merece la pena.
(Un día, un libro 274/365)
Escuchando: Summertime. Herbie Hancock.
4 comentarios
Magda Bandera es una persona muy agradable. En una ocasión, aun con Blog de Magda, enré a su página porque me llamó la atención el precioso nombre que tiene, le puse un comentario sobre un post que había escrito sobre Irak, sino mal recuerdo. Me envió un correo-e agradeciendo el comentario, muy amable, y la verdad que me extrañó, aunque positivamente, una no está acostumbrada que en blogs tan interesantes su autor o autora te tomen en cuenta. También se refería a mi nombre y al de ella que compartimos, porque era gracioso que al enviar yo un comentario salia: «Magda dice…», asi que se confundía. Teníamos que cambiar o ella o yo de nombre para poder enjviar en nuestros blogs para que no se confundiera. Fue una anécdota especial que me hace recordarla, además de visitar siempre su blog para leerlo.
A Magda Bandera sólo la conozco de su blog y de estos detalles, y sólo con esto ya tengo la misma impresión que tú; que debe ser una persona encantadora. Es uan pena que últimamente no escriba mucho en su blog. Espero algún día conocer en persona a las dos Magdas.
me alegro de que hayas disfrutado con semejante regalo, todo un lujo, tanto o mas que la autora, yo si tengo la suerte de conocerla y te aseguro que encantadora es un término demasiado escaso.
Espero que algún día pueda conocerla personalmente.