Salvat, 1971. 262 páginas. Trad. Fernando Vela. A Gamow le debemos muchas cosas, la más conocida la teoría del Big Bang (aunque el nombre se lo puso Hoyle para ridiculizarla lo que hizo fue hacerla más popular). Esta biografía, donde se repasa la historia de la física hasta sus días, ya la había leído, pero siempre es un placer releer a Gamow. Porque escribe muy bien y sabe explicar con claridad y sin perder rigor los conceptos más complicados de la física. Además incluye un montón de anécdotas (algo que me encanta) y muchas de ellas vividas en primera persona, porque Gamow es parte fundamental de la historia de la física. A mí me estremece leer cosas como esta, donde se narra el origen de la energía atómica: […]él y su ayudante, Fritz Strassman, bombardeando uranio con neutrones, habían encontrado la presencia del bario, un elemento que está a la mitad del sistema Mendeleev. Meitner y su sobrino, Otto Firsch (dos Otto en el asunto), que había ido con ella a Estocolmo, pensaron que ello había sido el resultado de una fisión, es decir, de la desintegración en dos de un núcleo de uranio golpeado por un neutrón. Tan pronto…
Salvat, 1969. 202 páginas. Este sí. Un libro que recoge una gran variedad de romances con buen ojo. Algo tendrá que ver que Dámaso Alonso sea un excelente poeta. No hay aparato crítico, pero no hace falta. Al leer estos romances casi se escucha la música. Una delicia que quiero compartir en parte con ustedes, por lo que les pongo una buena cantidad. Estos libritos se encuentran en casi todos los saldos, por muy poco precio. Creo que no puede haber mejor compra. Calificación: Imprescindible. Un día, un libro (257/365) No quiero ser monja, no, que niña namoradica só. Dejadme con mi placer, con mi placer y alegría, dejadme con mi porfía, que niña malpenadica só. Quien amores tiene, ¿cómo duerme? Duerme cada cual como puede. Quien amores tiene de la casada, ¿cómo duerme la noche ni el alba? Duerme cada cual como puede. Quien amores tiene, ¿cómo duerme? Duerme cada cual como puede. ¡Ay, Dios, quién hincase un dardo en aquel venadico pardo! El amor de la doncella que fuera discreta y bella, para el que gozare de ella será gustoso, aunque tardo. ¡Ay, Dios, quién hincase un dardo en aquel venadico pardo! El amor de la casada me…
Salvat, 1972. 196 páginas. Si ya soy un negado para apreciar la poesía mucho más para reseñar un libro. Una recopilación de los mejores poetas de hispanoamérica, supongo que bien escogida, aunque pocas han sido de mi gusto. Seguramente porque la mayoría son antiguas y demasiado carrinclosas para mí. Con todo hay poemas que me han gustado y los modernos mucho más. A continuación la selección: Canción Hermosa flor eres tú, Punzante espina soy yo. Tú eres ventura hecha vida Pensar que cunde soy yo. Tú eres virginal paloma, Odiosa mosca soy yo. Luna de nieve eres tú, Noche de pena soy yo. Tú eres el árbol frutecido, Carcomido tronco yo. Tú eres mi sol, mi sol eres, Noche de pesar soy yo. Tú eres vida de mi vida, Eres amor de amor. Alfombra a tus pies tendida Seré eternamente yo. Blando helecho que despliega Su traje de verde nuevo; Vestida de blanco, eres La estrella de mi mañana. Blanca nube, la más leve, Clara fuente de agua pura, Tu serás mi dulce engaño, Yo seré tu oscura sombra. Juan Zorrilla de San Martín IX Cayó la flor al río. Se ha marchitado, ha muerto. Ha brotado, en las grietas…
Salvat, 1972. 206 páginas (esta parte). Me daba vergüenza haber leído El caso Jane Eyre y no la obra original, así que con esta edición clásica de Salvat remediaba mi ignorancia. Pero, craso error, era sólo el primer volumen de dos, algo que no aparece en portada, sólo al final del libro. Por suerte, al ser un clásico, estaba disponible en internet y lo he ido leyendo en el móvil. El resumen en la wikipedia: Jane Eyre. Son las desventuras -con tintes folletinescos- de la protagonista desde que vive de caridad en casa de su tía, pasa después a un colegio de caridad, encuentra trabajo de institutriz, se enamora, hay un secreto, se escapa sin rumbo, tiene un encuentro inesperado y al final… tendrán que leerlo. Hay libros que te enganchan, éste lo hizo. No tanto por los giros de guión al estilo telenovela, que en la época estarían bien pero que ahora nos resultan un tanto postizos. Sí por los personajes, sobre todo por la indomable Jane Eyre, un prototipo de mujer rebelde y con ideas propias, que incluso ahora llama la atención. No quiero imaginarme en una época tan machista como cuando fue escrito. Hay clásicos que siguen…
Salvat, 1972. 148 páginas. Poco he leído de Tolstoi, para mi vergüenza, pero con este libro por lo menos disimulo mi ignorancia. El protagonista es un líder ávaro del cáucaso (que existió en realidad: Hadji Murad, que combatió a las tropas rusas. Pero un enfrentamiento con Shamil, otro líder, hace que decida pasarse al bando ruso, traicionando a los suyos. Me gustó especialmente el contraste entre la vida de los rebeldes y los oficiales rusos, así como la historia. No sé dónde leí que Tolstoi tenía siempre que escribir descripciones eternas, pero aquí no hay nada de eso, la trama discurre rápida y con ritmo. Coincido con la excelente reseña de solodelibros: Hadjí Murat – Lev N. Tolstói Calificación: Muy bueno. Un día, un libro (231/365) Extracto: En ella, la madre de Petruja, antes que nada, enviaba su bendición; en segundo lugar, saludos de todos y comunicaba la muerte del padrino, y finalmente la noticia de que Aksinia (la mujer de Piotr) «no quiso vivir con nosotros y se fue de sirvienta. Dicen que vive bien y con decencia». Se refería al regalo, al rublo, y después, palabra por palabra, venía lo que la vieja, compungida, con lágrimas, mandó escribir…