Labreu, 2022. 166 páginas. Poemario que contiene dos libros, tres partes, un prólogo, un epílogo y un collage. Empieza con la estirpe de los zahoríes, poemas dedicados a semblanzas de amigos que también andan con el péndulo buscando las palabras precisas. Continúa con una parábola del péndulo donde sobrevuelan las imágenes de la búsqueda, el andar sin rumbo, y el encuentro fortuito. Acaba con la pereza del nombre alrededor del yo y la imagen de lo cotidiano. Una edición muy cuidada y los poemas, magníficos, para saborear poco a poco para no empacharse, retratos de un mundo personal en el que es fácil sentirse identificado. Muy bueno. Els caballitos abandonats són el buit de la infantesa. Parlen de la decepció d’un lloc que els altres adoraven. A cada volta jo feia adéu a la mare per no ferir aquell amor que no entenia gaire. Al dit d’aquell home una cotorra argentina. Li acosta el mateix crostó que ell també rosega. Tots dos bruts tots dos als ulls tristor resseca. L’empenta dels daus fa homes i ocells ferits. Jo els miro al vagó mentre les estacions s’eternitzen als budells de la ciutat injusta. L’obsequi Et compraré l’aire de les paraules. La…
Labreu, 2021. 274 páginas. Al pasar de vigilante de museo a detective privado no hay muchas perspectivas de encontrar buenos casos, pero su primer encargo, muy bien pagado, va a ser vigilar a una persona en el pueblo de Santa Marta por encargo de un misterioso cliente. El investigador se integrará en la vida del pueblo tanto que más que vigilar a su objetivo se convertirá en su mejor amigo. No es una novela negra al uso porque siempre está jugueteando con su lado metaliterario, y todos lo que le sucede al protagonista bebe de los tópicos del género pero a la vez los transgrede. ¿Es una investigación real o todo es un montaje? ¿Por qué nada parece tener un destino? Al revés que en los tópicos del género aquí no hay un asesino por descubrir (aunque sí asesinatos). Libro muy divertido, que te atrapa y extraña a partes iguales, y que deja el regusto de una buena comida acompañada de un buen vino. Muy bueno. Quan l’Orson va entrar a El Centro va aixecar les celles en veure’m, somrient. Es va demanar una cervesa a la barra i va venir a seure. Vam encaixar de nou. Va dir-me que…
Labreu, 2016. 160 páginas. Tit. Or. Filial. Trad. Miquel Cabal Guarro. Hay que aplaudir a la editorial Labreu por haber publicado tanto y tan bien a Dovlatov. Un autor que, pese a su calidad, no está muy editado en castellano. La perestroika acaba de empezar y al protagonista lo mandan a cubrir una convención sobre El futuro de Rusia. El relato oscila entre el retrato irónico y punzante de los asistentes a la convención y sus posturas sobre el pasado, presente y futuro de Rusia y el reencuentro de su primer amor, que le traerá un caudal de recuerdos. Las desventuras de un joven todavía bisoño y su abandono de la universidad contrastan con la ironía del escritor adulto que, pese a todo, todavía conserva algo de su juventud. Ternura y humor se dan la mano con una prosa de primera línea, con una traducción excelente. Hay fragmentos para enmarcar (tantos que aquí recogen muchos: Citas de La Filial. Me ha gustado mucho. En Taràssevitx, el redactor, es va aixecar de l’escriptori, cobert de papers. —Entra, seu —va dir. Vaig seure. —Has hagut d’anar mai a Califòrnia? —Tres vegades. —I què, t’ha agradat? —I tant! Un lloc de somni, un…
Labreu, 2009. 232 páginas. Trad. Miquel Cabal. Un libro de Dovlatov no me fue suficiente. Después de La filial busqué esta Zona, apuntes de un vigilante de campo. El autor fue llamado a filas y le tocó ir a un campo de prisioneros, a un Gulag, pero como guardián. Un punto de vista diferente al que estamos acostumbrados. Los sucesos que se narran tienen crueldad, sí, pero sobre todo un carácter irreal. Ese mundo fuera del mundo que son las prisiones alcanzan límites insospechados bajo del yugo de una dictadura política. A esto tenemos que añadir el alto nivel literario de las narraciones de Dovlatov, que no se limitan a contarnos truculencias, lo hacen con prosa de calidad. Muy recomendable. Davant meu, a la vora d’un foc baix, hi havia un home assegut. Al seu costat, damunt l’herba, hi blanquejava un llibre. A la mà esquerra, hi tenia una llesca de pa… —Hola -digué en Kuptsov-. A veure què et sembla, mestre. Aquí explica que un home mata una vella per diners. Es turmenta tant, que se’n va voluntàriament a treballs forçats. Doncs imagina’t, vaig conèixer un tipus al Turquestan. El tipus n’havia pelat una trentena i no tenia cap…
Labreu, 2009. 204 páginas. Del disco que le dedicó Albert Plá pasé al documental ‘Pobres pobres que els donguin pel cul’ y de ahí a buscar algo publicado de este artista del margen, pintor, poeta, músico, guionista, pero sobre todo salvaje, experimental, que vivió al límite y murió como tantos víctima del SIDA. Hay una selección de 50 poemas (canciones de amor y droga), unas pistas interpretativas de los mismos, una selección de su diario y algunas cartas. También reproducciones de algunos de sus cuadros. Suficiente para hacerse una idea de la calidad del autor. LEFA’M Lefa’m lefa’m blau àngel de nit que passes de mi Jo de l’amor no sé què dir En realitat era el coixí L’àngel no hi és al dematí i tan sols hi ha lefa en el llit Visquin les nits, morin els dies Però lefa’m lefa’m blau àngel de nit que passes de mi MERITXELL Meritxell s’ha fet gran porta nois a dormir a casa Meritxell i aquests nois volen fer la pluja daurada Meritxell s’ha fet gran busca nois per muntar una farra Meritxell sap què vol se li en fot que li diguin guarra Meritxell i aquests nois se li, què? se…