Sería complicado decir cuál de los hermanos Hernández me gusta más. Los dos son especialistas en contar historias y contarlas bien. Mostrando, no narrando. Dejando al lector atar los cabos. Sagas familiares, que se extienden en el tiempo, y, sobre todo, de emociones profundas. Una delicia.
Libros del asteroide, 2011. 246 páginas. Tit. Or. Train to Pakistan. Trad. Marta Alcaraz. La independencia de la India provocó la creación de dos naciones: India y Pakistán, segregadas por motivos religiosos. Los musulmanes que vivían en la India empezaron a emigrar a Pakistán y lo mismo pasó con los sijs a la inversa. En un pueblo de la frontera se vivirá este triste trasiego de trenes, muchas veces cargados de muerte. Un libro estu...
Astiberri, 2015. 136 páginas. Tras la muerte de su padre tres hermanos vuelven a la casa del pueblo, la segunda residencia, para adecentarla un poco con vistas a venderla. En el proceso se despertarán los recuerdos de tantos fines de semana de su niñez y adolescencia. Me ha encantado. Como he tenido la suerte -esta vez sí- de leerlo en casita, he podido llorar a gusto.
Entrecomics, 2012. 80 páginas. La estructura la explican los autores en la primera página. Una historia de una página que se complementa, como en un espejo, en la página siguiente. Con personajes y situaciones que reaparecen de vez en cuando. Historias surrealistas, negrísimas, pasadas de vuelta, de personajes crueles, egoístas, deformes por fuera y por dentro. Genial. El prólogo de Paco Alcázar, una delicia.
Astiberri, 2016. 200 páginas. Esta segunda parte es menos divertida pero con más acción. Bustos se luce con unas viñetas de un dinamismo impactante. El conjunto de los dos tomos, impresionante.