Urano, 2009. 352 páginas. Tit. or. Free. Trad. Javier Fernández de Castro y Maria Belmonte Barrenechea. Interesante reflexión acerca de como el precio de la mayor parte de las cosas se va dirigiendo a cero. Especialmente todo lo relacionado con los bits, que según el autor acabará siendo gratis. Aunque con algunas cosas no estoy de acuerdo, sí con esta predicción final. Algunas reflexiones sobre como se monetizan los productos gratuitos, diferentes evoluciones de los sistemas de negocio en internet y el cambio del paradigma del mercado son muy interesantes. Piratería Nada lo puede describir mejor que la música online. Entre la reproducción digital y la distribución entre iguales (P2P, peer-to-peer), el coste real de distribuir música ha tocado realmente fondo. Este es un caso en el que el producto se ha convertido en gratuito debido a la pura fuerza de gravedad económica, con o sin un modelo de negocio. Esta fuerza es tan poderosa que han fallado las leyes, la protección contra copias, los sentimientos de culpabilidad, y cualquier otra barrera contra la piratería que hayan podido concebir los sellos discográficos (y sigan haciéndolo). Algunos artistas ponen su música en Internet como una forma de comercializar conciertos, mercancías, licencias…
Ediciones Urano 2004 (2000). Traducción: Eduardo Murillo. 606 páginas. Un libro muy útil Literariamente, este libro NO-ES-NADA, carece de un mínimo interés. Como relato de acción, tiene todos los ingredientes del género (giros inesperados, malos que no son malos, temas candentes, conspiración una gran institución de fondo pasándolas moradas…), es ágil y está bien contado. Quedan algunos flecos sueltos al final, pero no arruínan (más de lo que es) la obra… Te lo puedes leer, si tu mente clama una desconexión rápida de la realidad y de una ficción de calidad… Yo le he encontrado otras utilidades… (Un día, un libro 79/365) Escuchando: La mañana de la COPE. Federico Jiménez Losantos. 😛 El Cuchitril siempre apostando por la innovación y por unas reseñas diferentes, vuelve a colgar una reseña del posteador residente The Happy Butcher. Un placer, como siempre.