Pedro Riera estuvo en Yemen durante la primavera árabe en 2011 y posteriormente en 2016 también en Jordania. Ahí recogió el testimonio de muchas mujeres que viven en una sociedad patriarcal donde no pueden hacer nada sin la tutela de los hombres y en un país inmerso en una guerra civil desde 2015. Con esos testimonios construyó el personaje de Intisar, una mujer profesional de la salud a la que le gusta conducir -y adelantar a los hombres- que lleva como puede su vida dentro de los estrechos límites de libertad que posee. El primer tomo está dibujado por Nacho Casanova, con su estilo habitual en blanco u negro de líneas muy claras y está más centrado en el personaje. El segundo es a todo color a cargo de Sagar y se explica el contexto de Yemen, como han llegado a donde están, sin olvidar las historias centradas en las mujeres. El conjunto de los dos nos dibuja un retrato de un país del que conocemos poco y denuncia la terrible situación en la que viven las mujeres, sin ninguna libertad en su vida diaria. Una entrevista al autor: Pedro Riera. Muy bueno.
Diábolo, 2008. Ya reseñé sin mucho entusiasmo la primera parte de esta autobiografía aquí: Autobiografía no autorizada. Sin prisa, pero sin pausa, ya voy por el segundo, y es verdad que mejora. Las anécdotas que se dibujan en este volumen abarcan no sólo la vida del autor, sino también algunas recogidas de su entorno. Mantienen el caracter sencillo y costumbrista, se enfocan menos en las relaciones personales y algunas son simplemente la visión de alguien desayunando en un bar. Me ha gustado más que la primera parte. No sé si porque mis expectativas estaban más ajustadas o porque siempre me han gustado las cosas pequeñas. Más que las grandes gestas pretenciosas, las sonrisas y placeres cotidianos. Contemplar un culo hermoso por la calle es tan placentero como contemplar la Venus de Milo. No encuentro muchas reseñas, les enlazo la bitácora del autor: Nacho Casanova Calificación: Bueno. Les dejo el extracto de la contrportada, que por una vez define muy bien el contenido: Hace unos años me encontraba atascado en una adptación a a historieta de una novela algo rocambolesca, llena de situaciones escabrosas cogidas por los pelos y un montón de «efectos especiales» en el más puro estilo de la…
Ignoro si el títuo hace honor al contenido y realmente estas historias le han pasado realmente a Nacho Casanova. No importa demasiado porque no hay truculencia, son historias cotidianas, bien escritas y dibujadas, que nos pueden pasar a cualquiera (y algunas, como la pareja que va al cine, nos pasan). Pero esa sencillez, que es su principal virtud, también es su defecto, porque a mí no ha llegado a emocinarme demasiado. Leeré los dos siguientes volúmenes, sí, pero no voy a ir corriendo a por ellos. Dicen que los siguientes volúmenes mejoran, ya les contaré. Para pasar el rato y esbozar alguna sonrisa de ternura.