Universidad Nacional Autónoma de México, 2011. 200 páginas. Microcuentos escritos por Eva Díaz Riobello, Isabel González González, Teresa Serván e Isabel Wagemann a partir de el cuento El guardagujas de Arreola. Desplegando múltiples caminos desde ese tren en medio del desierto y una aldea en medio de la nada construyen diferentes historias que se entremezclan, se inspiran, se complementan y nos llevan a un espacio donde todo es posible. Los que menos me convencieron fueron los primeros, quizás por estar más apegados al cuento, pero después cogen vuelos y hay relatos magníficos (dejo muestras) que están entre los primeros de este género tan complicado. La autoría se diluye, primero, porque las autoras afirman haberse editado y aconsejado unas a otras, y porque a pesar de que en cada cuento aparecen al final las iniciales de la autora, uno los lee sin tenerlo en cuenta, aunque poco a poco vas reconociendo el estilo de cada una. Muy bueno. Hermanos En la aldea de F. la vida era muy dura. No había tiempo para juegos y, cuando nació mi hermano, aun hubo más bocas que alimentar. Siempre me molestó su alegría innata, aquella mirada soñadora que parecía elevarle por encima de nuestras…