Hiperion 1999, 2001. 80 páginas. Sorprendente poemario que presentó con tan solo 18 años al premio Hiperion, y lo ganó. Un lenguaje exquisito que transita diferentes temas y formatos, con unas imágenes propias de la adolescencia pero escritas con una madurez inaudita. Imposible no reconocerse en muchas de las imágenes que aparecen en estos poemas. También lamentarse de la prematura muerte de la autora, cuando contaba sólo 38 años. Dejo muestras para que se hagan una idea de la calidad de los poemas. Muy recomendable. VAMOS A VER, señor Baudelaire: quiero ganar un premio, ¿qué tengo que hacer? ¿Impresionarles con la fuerza de mi rabia? ¿Hacerles estremecer? Pero, señor, si ya se ha hecho todo: cada ocurrencia que pueda tener ya la han tenido otros mil antes que yo, ya la han escrito, y, si una vez lo hubo, ahora ya sí que no hay nada nuevo bajo el sol. Pienso en los ismos y me gustan todos, realmente hay cosas muy interesantes aun las más opuestas, esto y aquello, pero, delante de ellos, ¿qué voy a hacer? Ya no me queda sino leerle a usted, y a Oscar Wilde y a Huysmans y a Verlaine, y admirar a los…