Siruela, 2009. 192 páginas. Cuatro niños especiales son captados por una escuela que ve en ellos a los niños índigo, seres especiales que guiarán a la humanidad a un nuevo estadio evolutivo. Pero las cosas no se desarrollan como se pretendían. Me costó encontrar este libro y tenía el miedo habitual de estos casos, después de tanto esfuerzo encontrarme con un libro malo. Por suerte no ha sido el caso. Con una estructura coral en la que diferentes voces narrativas cuentan el ayer y el ahora se van juntando las piezas de la trama. El profesor del centro que se dejó arrastrar a Ibiza, el niño de piel azul de la selva de Guatemala, la pianista precoz, la niña superdotada que vive a la sombra de la hermana muerta y el niño gordito sobreprotegido por una madre loca. El único problema que le veo es que a mitad del libro ya tenemos la imagen completa de la historia, y aunque las subtramas y los personajes tienen interés propio todo empieza a dar vueltas sobre el mismo eje. Pero está muy bien escrita y estructurada, lo suficiente para haber tenido mejor fortuna editorial. Muy recomendable. , el regreso de los b’alameb’…