Primera colección
Aunque debí leer ‘Adios, cordera’ en bachillerato, tenía en un olvido deliberado a Clarín. No me interesaba leer nada suyo. Hasta que tropecé, en la biblioteca básica Salvat, con el volumen ‘Doña Berta y otros relatos’. Desde entonces me convertí en fan indiscutible. Pasé de repetir como un lorito que ‘La regenta’ era una versión menor de ‘Madame Bovary’ a gritar a los cuatro vientos que la primera daba sopa con hondas a la segunda. El alma es voluble como pluma en el viento.
Recientemene he comprado dos recopilatorios de cuentos de Clarín; he empezado con este ya que es la primera recolección de sus cuentos. Su primera publicación fue en 1893, pero en 1944 se suprimió la novela corta ‘El señor’ -supuestamente por razones ‘morales’. Esta supresión afectó hasta la duodécima edición de 1984. En la que acabo de comprar han sido restituidos el cuento y el título original.
Los doce cuentos y la novela corta pueden leerse en la biblioteca cervantes virtual.En ‘El señor’ un sacerdote completamente dedicado a la obra de Dios sufre a causa de un amor totalmente platónico por una joven de su localidad. El famoso cuento ‘Adios, cordera’ traza un paralelismo entre dos despedidas; la que profieren los hermanos Pinín y Rosa a ‘Cordera’, vaca de la que se han encariñado y que su padre ha vendido para salvar la hacienda, y la despedida de Rosa a su hermano al partir para la guerra. El resto de relatos son menos conocidos, y su calidad es desigual; personalmente me quedo con ‘Protesto’, donde un comerciante adinerado intenta comprar su entrada en el paraíso donando dinero a la liglesia, ‘Un jornalero’, historia de un erudito que se ve envuelto en una revuelta y ‘La ronca’, narración de las desventuras de una actriz de segunda fila por culpa de su ronquera.
Un escritor excelente al que, además, pueden leer gratis. ¿A qué están esperando?
(Un día, un libro 119/365)
Escuchando: ‘Queremos Pastel’. Molotov
6 comentarios
Los españoles, como es habitual, solemos despreciar lo que se produce en nuestra tierra y eso nos lleva a cometer atrocidades como la que se sigue ejerciendo contra Clarín. Pero, claro, de nada sirve decirlo una o mil veces…
Lo que hay que hacer, como ya hizo Palimp o como hice yo es leer La regenta y olvidarse de comparaciones.
La Regenta es una obra maestra de la literatura de todos los tiempos. Que no sea reconocida a sí es, en gran medida, culpa nuestra.
(Y, tal vez, del sistema educativo…pero ¿quién tiene la receta para explicar literatura a adolescentes sin aburrirles o sin hacerles aborrecer de la lectura?… pero eso, es otra cuestión)
Ah… sigo admirando tu propósito… un día, un libro.
Saludos
Un abraso sus guebosssssssssss¡¡ que disfrutéis las vacas¡¡¡
Gracias a los dos. Portnoy, totalmente de acuerdo contigo. A cuantos escritores he llegado a tener respeto (=no leerlos) y luego he disfrutado como un simio con ellos.
Me ha gustado mucho lo que dices de Clarín.Precisamente en mi blog hablo sobre La regenta.Me encanta este libro.Soy una asidua lectora de Clarín.Creo que es un escritor estupendo.Saludos
¿qué estoy esperando?
Desde los ¿14? años lloro al recordar «Adiós, Cordera…»
Puede que lo retome. Tendrá otra lectura, son tantos años…
Gracias por recordarlo 🙂
Gatito, me alegra compartir gustos. Me apunto a tus paseos.
Nfer, yo tambíen lloré al releerlo. Gracias por la visita.