Nuevo teatro fronterizo, 2021. 176 páginas.

Conjunto de textos donde se mezcla el ensayo, el teatro, poemas, narraciones, todo para dibujar un retrato del exilio, el desarraigo, la migración, como abandonas tu hogar para dejar de pertenecer para siempre a ningún sitio.

En general me han gustado más los textos de ficción que los ensayos, pero les ha quedado un libro muy apañado, combativo y triste.

Bueno.

Walter Benjamín.- Vinieron hasta aquí, españoles como usted, a terminar esta idea de progreso que el gobierno francés, con el beneplácito del monstruoso Tercer Reich, quiso construir. Más imperio, más catástrofe…
María Zambrano.- Siempre caminamos entre escombros. Y entre ellos, los escombros de la historia. ¿Lo ve allí, a lo lejos? Había un campo de concentración. Cuánta miseria, cuánto dolor en estos hierros. Y, sin embargo…
Walter Benjamín.- Hace frío, mucho frío. El mismo que en el otoño último… ¿Lo siente?
María Zambrano.- Y, sin embargo, digo, ahí las tiene, las amapolas, de ese rojo que no es sino el de la sangre derramada. Esta tierra los recuerda.
Silencio.
Walter Benjamín.- Me he sentido muchas veces dentro de este mapa, ¿sabe? Un sueño repetido de laberintos áridos… Pero no somos ni nosotros ni la tierra quienes tenemos que recordarlo.
María Zambrano.- Es tan increíble y hermoso… Se ofrece la flor en la sombra. Como las palabras, ¿no le parece? Palabras leves, imprecisas… Esas que hemos estado una vida entera buscando. Alguien las recogerá, sí. Menos esas que lleva ahí, tan celosamente.
Walter Benjamín.- ¿Estas?
María Zambrano.- ¿Qué lleva en la maleta, si no es indiscreción?
Walter Benjamín.- Una pipa y un libro infantil, ¿lo quiere ver? Mi primer libro. Quisiera, algún día, aprender a leer como un niño.
Silencio.
María Zambrano.- Tenía razón, ¿de dónde viene este frío?
Walter Benjamín.- Si nos damos prisa llegaremos a España.
María Zambrano.- Ni usted ni yo nos hemos ido nunca de España. Walter Benjamín.- ¿Qué hacemos aquí, entonces?
María Zambrano.- ¿Lo siente?
Walter Benjamín.- Qué extraño.
María Zambrano.- Está nevando.
r
Walter Benjamín.- ¿Quedarán nuestras huellas dibujadas?
María Zambrano.- Ya hemos llegado, señor Benjamín.
Walter Benjamín.-¿A dónde?
María Zambrano.- Hemos llegado al exilio.