Circe, 2002. 320 páginas. Tit. Or. Eating naked. Trad. Gian Gastell-Giar. Incluye los siguientes cuentos: Un gozoso vacío Comiendo desnudos Parte de la historia El profesor de Chaucer El bungalow de cedro Qué lástima Kansas Cambios que se avecinan Aguas turbulentas Con Franz y Jane La isla del diablo Cenizas negras los muertos no necesitan sexo seguro así que ya te imaginarás lo que le respondí Defectos del látex Cynthia, mi hermana Que ya me empezaron decepcionando, porque los dos primeros cuentos -incluyendo el que da título al libro- me parecieron bastante flojos. Por suerte luego encontramos bastantes que merecen la pena. No hay ninguno malo, todos están bastante bien construidos, pero pocos son de los que te llegan realmente. El primero, por ejemplo, se articula alrededor de una muerte absurda: un poeta es aplastado por un cerdo que estaba siendo transportado a un rodaje. Lo ridículo de la muerte afecta a su mujer e hijos, y el autor simplemente va desgranando los sucesos, sin ir más allá. En La isla del diablo el protagonista está atrapado en un matrimonio desgraciado y su válvula de escape es construir maquetas en el sótano de prisiones. La metáfora no puede ser más…