Ed. Espasa-Calpe, Col. Austral, 1941, 1942, 1942, 1943, 1943, 1944, 1944, 1945, 1946, 1947, 1948. 300 páginas. Mujer de armas tomar Rómulo Gallegos no es nuevo en este Cuchitril. Empecé a leerlo porque Bolaño ganó el premio que lleva su nombre; un motivo pedestre pero que me ha llevado a conocer a un gran autor. Doña Bárbara es el libro más famoso del autor. El ejemplar que tengo, de la famosa colección Austral que se me cae a cachos, es de 1948 y ya llevaba once ediciones. No quiero ni pensar las que tendrá ahora. Un verdadero éxito de ventas. Santos Luzardo, un joven de ciudad, viaja a los llanos para hacerse cargo de una hacienda. Allí se encontrará con Doña Bárbara, la devoradora de hombres, salvaje, bella y terrible a la vez. Doña Bárbara es la cacique del territorio y tiene corrompida a la ley. Un hombrecito como Santos parece poca cosa para plantarle cara pero ¿quién sabe? No es extraño que el libro haya tenido tanto éxito; tiene todos lo ingredientes para ello: acción, exotismo, una mujer arrebatadora con caracter, el paisaje inigualable de la cuenca del Orinoco. Personalmente prefiero Canaima, donde Rómulo Gallegos explota mejor su dominio…
Ed. Espasa-Calpe, Col. Austral, 1944, 1946, 1950, 1961. 207 páginas. Explotación petrolera Éste es otro de los libros que compré en Granada, decidido a intentar leer la obra de Rómulo Gallegos. Me queda Doña Bárbara, pero ya caerá. Otro libro de la Colección Austral, a la que ya expliqué que le tengo especial cariño. Demetrio Montiel Montiel de los Montieles, quizá abrumado por lo extremadamente linajudo de su apellido, y gracias a su carácter indómito, no está muy por la labor de seguir la tradición familiar: —Pero yo nací desnudo en pelota —solía decir después— y como en mi casa me vistieron de ajeno sin pedirme permiso al echarme encima tantos Montieles de la Calle Derecha, fui a desvestirme de ellos en El Saladillo, para hacerme un traje a mi medida desde pequeño. Y dejó tirados todos sus Montieles por las calles del barrio escandaloso, donde dio puñetazos, se enredó en palizas y vio dar puñaladas, sin que grimas de sangre le turbaran la sonrisa de su serenidad. Pero no cuenta el libro las aventuras de Demetrio, sino las de su hija, que después de huir a los Estados Unidos regresará a una Venezuela en la que la riqueza del…
Ed. Aguilar, 1968. 478 pag. Exhuberante Orinoco Otro autor que leo gracias a mi ignorancia. No podía ser que estuviera leyendo a autores con el premio ‘Romulo Gallegos’ y no supiera nada del escritor que da nombre al premio. Me terminó de decidir un ensayo de Bolaño en ‘Entre paréntesis’; comentaba que vio una placa por la calle Sepúlveda donde decía que Gallegos había vivido ahí. Desde entonces ando a la búsqueda de la placa, porque yo vivo cerca, pero no he tenido ningún éxito. Si alguien sabe donde se encuentra, que me lo diga; prometo recompensarle. Más éxito tuve a la hora de buscar sus libros. Me fui a estantería de libros y encontré unos cuantos. Bastantes en la librería Praga de Granada. Así que cuando estas vacaciones pasé por allí, me acerqué y aproveché para comprar dos libros de Gallegos y conversar con el amable librero que me atendió sobre el futuro de las librerías de viejo. No hay que preocuparse; no les va mal. Como otras veces he descubierto que ya había leído otro libro del autor: Tierra bajo los pies. Mi problema es que soy un completo desmemoriado para los nombres. Con un poco de suerte…