Norma, 2012. 270 páginas. Biografía del físico Richard Feynman, ganador del nobel de física y posiblemente uno de los más extravagantes del mundo. Participó en el proyecto Manhattan, donde se hizo experto en abrir cajas fuertes, inventó los diagramas que llevan su nombre, que todavía se usan en la mecánica cuántica, era un experto percusionista y trabajaba en un bar de topless. Toda una figura. El cómic recoge su trayectoria científica, algunas de sus exposiciones más famosas -con lo que hace buena divulgación- y, sobre todo, muchas de las anécdotas que el propio Feynman comentó en sus libros y que son una delicia. Yo ya las conocía porque he leído varias veces su libro ¿Está usted de broma, sr. Feynman?. Pero es una excelente aproximación a tan curioso personaje. Para mí es todo un modelo a seguir, una persona inteligente que a la vez era cercana y con intereses diversos, con mucho talento y una gran humanidad. Alguien con quien seguro hubiera sido una delicia irse a tomar unas copas (o unos refrescos, porque dejó temprano de beber). Muy bueno.
Norma, 2020. 340 páginas. Trad. Ana Guelbenzu. Al hilo del éxito de la biografía de Feynman (que no he leído pero que tenía pendiente antes que esta) publican ésta del físico más popular después de Einstein, aunque seguramente más por su condición física que por sus contribuciones revolucionarias en el campo de la cosmología y los agujeros negros. Los autores hilan muy bien vida y obra y explican con claridad los asuntos científicos, lo que demuestra que, cuando se quiere, se puede. Pasan de puntillas por los aspectos más de salseo de su biografía y nos ofrecen una biografía correcta del científico que desentrañó los misterios de los agujeros negros. Bueno.