Edaf, 2000. 254 páginas. La revista La Codorniz, fundada por Miguel Mihura, fue, posiblemente, el único rayito de sol que pudo calentar el intelecto de los españoles en la posguerra. Como dijo un académico ‘Tenía la cantidad justa de humor que podía permitir la dictadura’. La antología adopta un enfoque novedoso: en vez de seleccionar los mejores chistes de cada sección, han creado una serie de Codornices representativas de cada época. Son doce cuadernos de 16 páginas que van desde la época surrealista y de humor blanco de Mihura a los tímidos avances de destape de la última época. Algunos chistes gráficos son intemporales, aunque las secciones de texto han envejecido -en mi opinión- bastante mal. Se incluyen los textos de la polémica Mihura-De la Iglesia y su reconciliación a cargo de Neville. También un índice onomástico completísimo.