La Cúpula, 2007. 164 páginas. Tit. Or. The boulevard of broken dreams. Trad. Francisco Pérez Navarro. Se publicó originalmente en 1991, se reeditó en 2002 y lo publicó aquí La Cúpula en 2007 no a gusto del respetable porque se redujo el tamaño y hay un error de composición en dos páginas que están cambiadas de orden. Al mejor maestro se le escapa un borrón. Creo que el autor ya tenía un personaje, Waldo, un gato antropomorfo que bebe de las fuentes de Félix o Krazy Kat. Aquí se convierte en una especie de espíritu maligno que acompaña a toda una saga de ilustradores y animadores, desde el maestro Windsor Newton (inspirado en Windsor McCay) que mezclaba animación con espectáculos de vodevil, hasta la mercadotecnia actual de muñequitos, pasando por la creación de parques de atracciones y la transformación de los cortos del estudio en niñerías edulcoradas por culpa de la Disney. Y es que como se dice casi al empezar el libro: Habéis cogido mi arte y lo habéis transformado en mierda Alcohol, problemas de adicción, infidelidades, desgracias personales e infiernos varios, todos con la presencia fantasmal de ese Waldo que parece la esencia del mal, y que sólo…
Mal cuerpo se te queda tras la lectura de este ‘Sin comentarios’, que hace referencia tanto a la ausencia de texto en las historias que aquí se cuentan, como a la crudeza de las situaciones que reflejan. Sabemos, nos han contado, hay documentales, que en otras partes del mundo la gente vive en la miseria, trabaja como esclavos, se prostituyen a edades tempranas, son víctimas de la violencia, sufren cruentas guerras. Intentamos olvidarlo para seguir viviendo felices. Este cómic nos lo pondrá un poco más difícil. El mundo es una mierda y Brun nos lo cuenta como nadie, con un estilo de dibujo a medio camino entre lo naif y lo underground. Por desgracia no hay más comics del autor, aunque en la wikipedia francesa se ve que tiene más publicados. Para remover conciencias. Más reseñas y escaneados: No Comment Ivan Brun, Cómic: NO COMMENT (Ivan Brun) y No Comment de Ivan Brun. Calificación: Muy bueno y desasosegante.
Gran descubrimiento esta oscura y tremenda versión de Pinocho. Siguiendo muy de cerca la fábula original un inventor ha fabricado un niño mecánico que es una máquina de destrucción diseñada para el ejército. Pero una cucaracha (trasunto de Pepito Grillo) se cuela en su cabeza y a partir de ahí el niño se embarcará en un reverso tenebroso de las aventuras del otro Pinocho. Denuncia social, paisajes casi apocalípticos, ironía… todo lo que la humanidad tiene de malo aparece en estas páginas. Y queda espacio para el humor. Una historia muy buena y un grafismo excelente. No he encontrado muchas reseñas (merece más), aquí tienen unas cuantas: Pinocchio. Winshluss (autor; couleurs : Cizo). Requins Marteaux. , Pinocchio, de Winshluss* y Winshluss y Pinocchio.. En esta última encontrarán muchas páginas escaneadas. Calificación: Muy bueno.
La Cúpula. Tener tableta ayuda a leer tebeos. Pocas reseñas he encontrado de éste, así que ni siquiera sé qué entrada pudo recomendármelo, pero ha merecido la pena. Estructurado en tres volúmenes de unas 120 páginas cada uno cuenta la historia de un encuentro en una ciudad de provincias. Una sensación desconocida está narrado desde el punto de vista de Vincent, un peluquero apocado que vive en el piso de debajo de su madre y que apenas tiene vida. Pero una dependienta le resulta conocida y se convertirá en una obsesión; empezará a seguirla. ¡Arriba las manos! ofrece el punto de vista de la perseguida, Rosalie Blum, que se ha dado cuenta de que la están siguiendo y pide a su sobrina que a su vez haga lo mismo con Vincent. ¡Al azar, Baltazar! concluye la trilogía con el encuentro de los protagonistas y las consecuencias que se derivan de ello. Se incluye un epílogo que explica la sensación de familiaridad que Rosalie provocó en Vincent. El cómic de autor sigue vivo en Francia, por suerte para todos aquellos que disfrutamos de historias alejadas de la gran industria. He encontrado dos reseñas: Lecturas: Rosalie Blum, de Camille Jourdy y Rosalie…
La Cúpula, 2011. 178 páginas. Creo que me enteré de la existencia de este cómic por esta reseña en tono irónico: Kafka. Siendo admirador de Crumb y de Kafka, aunque no conocía a Mairowitz tenía que leerla. Ha sido un placer; los dibujos de Crumb ilustran a la perfección el texto y el argumento de algunas de las obras de Kafka, aunque se aprecian mejor si ya has leído los libros. Kafka era todo un personaje, no cabe duda. Todo esto me recuerda que no lo releo desde que se me quemaron sus obras completas. Algo a lo que hay que ponerle remedio de inmediato. Calificación: Muy bueno. Un día, un libro (256/365)