Debolsillo, 2020. 312 páginas. Creía haber leído todo lo publicado de mi admirado Cortázar y se me habían escapado estas Clases de literatura, una serie de clases/charlas informales que dictó en Berkeley en 1980 y que estaban registradas en cinta pero no publicadas. En ellas habla de lo que entiende por relato fantástico o realista, el papel del escritor, si tiene que ser comprometido o no y disecciona algunos de sus relatos que pone como ejemplo de lo que quiere decir. Los alumnos tienen su turno de preguntas y es un apartado interesante tanto por la calidad de las mismas como por las respuestas que nos proporciona Cortázar. Relata muchas anécdotas de cómo llegó a crear algunos de sus cuentos y qué quiso decir en ellos. Un ejemplo de lo que él entiende por realismo (que incluye lo que para otros es fantástico): La novela de Verne no es de las mejores de las suyas pero el tema es fascinante porque por primera vez en una literatura occidental se plantea el problema del hombre invisible, alguien que a través de procesos químicos —ya he olvidado por completo lo que sucedía en el libro— llega a ser invisible. Se la presté…
Esta obra no se publicó en su momento, en teoría por falta de calidad, pero en las obras completas de RBA donde la he leído la han puesto en su sitio, al comienzo de todo. Es curioso lo de la falta de calidad, porque está realmente bien escrita. Puede denominarse novela de amigos, ya que al igual que Rayuela o El libro de Manuel la historia gira alrededor de un grupo que va conversando y al que le van ocurriendo cosas. No tantas ni de tanto calado como en las que cito, pero la calidad de la prosa basta para sustentar la novela. Podemos pensar que quien no aconsejó su publicación se equivocó, o también que obligó a Cortázar a darle una vuelta de tuerca y crear esa obra maestra que es Rayuela. Más reseñas (hay muy pocas) aquí: El examen Julio Cortazar y El Examen – Julio Cortázar. Calificación: Muy bueno.
A Cortázar lo empecé a leer muy joven, y me fascinó. Lo sigo releyendo y cada vez me gusta más, voy cambiando mis cuentos preferidos y descubriendo matices nuevos. Este volumen es el segundo de su producción e incluye los siguientes cuentos: Parte I «Continuidad de los parques» «No se culpe a nadie» «El río» «Los venenos» «La puerta condenada» «Las Ménades». Parte II «El ídolo de las Cícladas» «Una flor amarilla» «Sobremesa» «La banda» «Los amigos» «El móvil» «Torito» Parte III «Relato con un fondo de agua» «Después del almuerzo» «Axolotl» «La noche boca arriba» «Final del juego» Detalle obtenido de la wikipedia: Final del juego (libro), que además tiene entradas de detalle para varios de los cuentos. El origen de algunos está en anécdotas personales del autor, así La noche boca arriba está inspirada en un viaje en motocicleta por París, o Axolotl, todo un clásico, en una visita al acuario (no es de mis preferidos pero entiendo su fama). Personalmente cada vez que me cuesta ponerme un jersey pienso en No se culpe a nadie, y Continuidad de los parques es, en su brevedad, un relato circular perfecto (lo adjunto al final). En muchos de los relatos…
Ediciones B, 1988. 420 páginas. Compré este libro en 1990, cuando vivía en Donostia, en la librería Lagun (que tanto ha sufrido los ataques de la kale borroka). Dentro he encontrado un punto de libro de 1997, recién llegado a Barcelona, siete años después. ¿Quién hubiera dicho que despues de otros siete años me casaría? Tendría que haberlo releído en el 2014… Poca cosa puedo añadir a los cientos de páginas que se han escrito sobre el autor y este libro, siempre considerado como menor, pero más por la estatura de sus hermanos que por su propia calidad. Aquí tienen todo un ensayo: Libro de Manuel, de Julio Cortázar, entre la vanguardia estética y la revolución política. El libro narra las aventuras de un grupo que prepara una especie de atentado/secuestro, mientras se intercalan noticias reales del periódico, se narran las vidas y amores de algunos miembros del grupo, y se habla de la propia creación del libro, destinada a Manuel, un bebé. Que sea un libro comprometido siempre se ha utilizado en su contra, pero Cortázar es capaz de armar una buena novela, de innovar con la intercalación de noticias, y salir airoso de todo junto. Hay párrafos memorables….
Alfaguara, 2010. 574 páginas. Edición de Aurora Bernárdez y Carles Álvarez Garriga. El cronopio original 24 de agosto de 1953. Cortázar acaba de casarse ante dos testigos y celebra su boda con ellos en un restaurante chino. Le acaban de encargar la traducción de Poe (ahora canónica) por la que le pagarán la fortuna -para él- de 2.500 dólares. Pero como no le dan ningún anticipo tiene que pedir prestado dinero a su amigo Eduardo para poder llevar a cabo su plan: irse a Roma a vivir mientras traduce y una vez cobre recorrer Italia. Ésta es sólo una de las penalidades que pasó Julio Cortázar cuando empezó a vivir en París, y que he descubierto gracias al regalo inesperado y generoso de un buen amigo. Las cartas enviadas al pintor y poeta argentino Eduardo Jonquières nos dan acceso a la intimidad de un escritor inimitable, uno de los mejores escritores de cuentos del siglo XX. Tantas páginas de cartas me parecieron, a priori, farragosas y decidí que partiría su lectura en bloques. Pero cuando empecé a leer no pude parar y lo leí seguido. Es cierto que se lee como una novela, y nos permite ver lo que no…