Melusina, 2009. 140 páginas. Trad. Albert Fuentes. Tit. or. A history of satanism. Más que un exhaustivo estudio histórico el autor aprovecha para criticar la credulidad e irracionalidad de los padres de la iglesia, capaces de creer historias increíbles de posesiones demoníacas. Se afirma sin mucha prueba documental -no digo que no la haya- que hubo algún culto real en la edad media, un eco del paganismo. Ha sido una lectura curiosa, más por el estilo desenfadado que por la erudición. Se incluye un apéndice muy interesante sobre el caso de unos mistificadores y hay bastantes referencias a la masonería. Había otra versión de esta profunda especulación, y tiene el mérito de explicar realmente por qué los demonios se pasan todo el día y toda la noche intentando corromper a hombres y mujeres que, de lo contrario, no mostrarían la menor inclinación a pecar. No sé si algún guionista de Hollywood habrá leído el apócrifo Libro de Enoch, pero si han tenido la ocasión de ver recientemente La mujer del obispo, pueden hacerse una idea de lo que digo. Cary Grant es un ángel (por muy buen tipo que sea, su cara se parece menos a la de un ángel…