RBA, 2013. 252 páginas. Reencontrarse con Gálvez es como tomar unas cañas con ese buen amigo al que hace tiempo que no ves, y del que no te acordabas que lo echabas de menos. La novela arranca con un curioso negocio en las cuevas asturianas, una especie de parque temático basado en Atapuerca, y acaba en la sabana africana, desmantelando una red de trata de albinos y con un cameo final de alto postín. Ni el autor ha perdido la gracia escribiendo ni se deja de querer a este periodista metido a detective al que le pasan las cosas más inverosímiles pese a ser lo contrario de un tipo duro. Totalmente disfrutable. Era una buena fórmula. Cualquier otra frase habría quedado absurda en aquellos momentos en que todas las conversaciones comenzaban con cifras de déficit, ejemplos de personas conocidas que habían perdido su empleo, tasas de paro juvenil y devastadores anuncios sobre el porcentaje esperado de crecimiento negativo de la economía española. Charlamos de asuntos de poca consistencia y le mentí sobre mi estancia en Asturias. Le dije que había vuelto a Madrid para continuar el trabajo con una prospección de mercado en el nicho de los parques temáticos. —Pero…
Ediciones Santillana 2001, punto de lectura, 2002. 327 pág. Un nuevo Gálvez Ya conocía las aventuras de Gálvez a través de los libros ‘Demasiado para Gálvez’ y ‘Gálvez en Euskadi’ (este último un libro encantador que sería difícil de escribir y publicar hoy). Siempre había creído que habría más, muchos más, lo que revela, una vez más, mi ignorancia del mundo editorial. Cuando el otro día, en pleno Corte Inglés, vi que regalaban éste si comprabas dos libros de punto de lectura, me lancé de cabeza. Al leerlo descubrí que es el tercero y que no hay más. Una pena porque uno coge cariño enseguida a este repotero-detective ocasional buenazo al que las circunstancias se encargan de pasear de aquí para allá y, en ocasiones, de recibir lo que no le corresponde. Dentro de la literatura, y en ocasiones de la novela negra, nos encontramos a estos ‘héroes por accidente’ que logran salir ilesos de las peores situaciones no a causa de su fuerza o su inteligencia, sino porque existe un dios bondadoso que se apiada de sus criaturas (el autor). En esta ocasión, seguiremos a Gálvez en la investigación de una misteriosa trama que impica a una empresa de…