Una de las ventajas del libro electrónico es la facilidad de encontrar libros de difícil acceso. Este omnibús, a pesar de tener adaptación cinematográfica (ver poster) no se encuentra con facilidad. La trama es mínima; en una estación de tercera fila de California se junta un microcosmos de perdedores: un conductor atrapado en un matrimonio sin futuro, un viejo cascarrabias, una familia de vacaciones fuera de lugar y una chica con sueños de Hollywood, entre otros. No es una de sus novelas más famosas, pero el talento de Steinbeck en el retrato psicológico de ese grupo de segunda pero lleno de pasiones y deseos insatisfechos es innegable. Deja un buen poso. Más críticas aquí: JOHN STEINBACK (1948) – El ómnibus perdido y aquí: REALISMO AMERICANO>> El ómnibus perdido, de J.Steinbeck Calificación: Bueno. (Un día, un libro 2/365) Extracto:[-] A cuarenta y dos millas al sur de San Isidro, en una gran autopista que atraviesa California de Norte a Sur, existe un cruce de caminos que se denomina, desde hace unos ochenta años, Rebel Corners. Desde aquí, una carretera secundaria parte en dirección Oeste y, a las cuarenta y nueve millas, tropieza con otra autopista que, desde San Francisco conduce a…
Editorial Salvat, 1994. 270 páginas. Tit. Or. The acts of King Arthur and his Noble Kights. Trad. Carlos Gardini. Camelot revisitada Cuando en mi juventud leí casi todo lo de Steinbeck también cayó éste. En su momento me pareció muy bueno. Releyéndolo no me lo ha parecido tanto, pero al llegar a las páginas finales, con reflexiones del autor sobre la marcha del libro me siento culpable. Con la de trabajo que le costó escribirlo a uno le sabe mal sacarle defectos a la obra. Todos conocemos más o menos leyendas sobre el rey Arturo y la tabla redonda. Steinbeck intenta actualizar las historias de Thomas Malory (un autor que merece libro aparte) con el objetivo de que sus lectores se emocionen tanto como lo hizo él cuando las leyó de niño. El objetivo se consigue, y eso es lo importante. Algunas reflexiones me han llamado la atención: —Te has topado con un misterio —dijo Merlín—. Poco después de la crucifixión de Jesucristo, José, un mercader de Arimatea que dio sepultura a Nuestro Señor, navegó hasta estas tierras con el cáliz sagrado de la Ultima Cena rebosante de sangre sagrada, y también con la lanza que el romano Longinus empuñó…