Historia de un romance entre Asís Taboada, Marquesa de Andrade (viuda) y el gaditano Diego Pacheco. Una insolación de la primera da pie al acercamiento entre los dos personajes que conduce a un flirteo y finalmente a la consumación del amor. Sorprende la novela por su frescura, el uso de diferentes registros del lenguaje, del más popular al más culto y, sobre todo, por la falta de culpa por parte de la mujer en el asunto amoroso. Es un canto al disfrute increíble en esa época. La mujer toma sus decisiones y tira p’alante, no es una seducida ni una violentada, sino que es una mujer empoderada. Tiene entrada en la wikipedia: Insolación y es muy divertida. Muy recomendable. —La mano, jermosa —repitió la gitana. Se la alargué y ella la agarró haciéndomela tener abierta. Pacheco contemplaba las dos manos unidas. —¡Qué contraste! —murmuró en voz baja, no como el que dice una galantería a una señora, sino como el que hace una reflexión entre sí. En efecto, sin vanidad, tengo que reconocer que la mano de la gitana, al lado de la mía, parecía un pedazo de cecina feísimo: la tumbaga de plata, donde resplandecía una esmeralda falsa espantosa,…
Cátedra, 1991. 584 páginas. El joven pintor Silvio Lago llega a España con la intención de hacerse un nombre en el mundo del arte. Tras trasladarse a Madrid empezará a tener un nombre en los círculos de la buena sociedad, que enseguida le realizan encargos. Pero para él no es suficiente, él busca el Arte con mayúsculas, algo que vaya más allá de sus retratos al pastel. Tras una serie de aventuras amorosas viajará a París en busca de mejores horizontes. No es la novela que más me ha gustado de doña Emilia. Abunda en opiniones acerca de pintores del momento (y clásicos, hay un largo viaje del pintor por las capitales europeas evaluando las joyas de los diferentes museos). Estas opiniones son de la autora, y aunque resultan muy interesantes desde un punto de vista histórico, narrativamente lastran la narración demasiado. Pese a esto la autora sigue brillando en descripción de personajes, muestra de ideas y conflictos amorosos. Además se trata de una novela en clave. El protagonista es un trasunto de Joaquín Vaamonde, y Minia Dumbria, protectora del pintor, es la propia Emilia Pardo Bazán. Todo esto y algunas identificaciones más se explican muy bien en el prólogo,…
RBA Continuación de su obra más famosa, Los Pazos de Ulloa. Los niños han crecido y existe una atracción entre ellos, que ignoran que son hermanos. Un primo joven con demasiadas cosas en la cabeza viaja a los pazos con la intención de casarse con su sobrina y enfrentar al marqués sin saber lo que se va a encontrar y que con su llegada abrirá los ojos a los jóvenes. Sigue siendo excelente en el retrato de personajes, ese primo atolondrado por excesivas lecturas y teorías y poca práctica, ese paisaje rural que está detrás de todo. Pero la historia me ha resultado menos interesante que los Pazos. —¡Allá en los pueblos se educa a las muchachas de un modo y por aquí las educamos de otro!… Allá queréis unas mojigatas, unas mírame y no me toques, que estén siempre haciendo remilgos, que no sirvan para nada, que se pongan a morir en cuanto mueven un pie de aquí a la escalera de la cocina… y luego mucho de sí señor, de gran virtud y gran aquel, y luego sabe Dios lo que hay por dentro, que detrás de la cruz anda el diablo, y las que parecen unas santas……
RBA, 2007. 220 páginas. Decadencia Sigo con las obras de Emilia Pardo Bazán; esta fue la que primero leí, pero como es habitual en mí la reseño tan tarde que cai no me acuerdo. Julián es un sacerdote que llega a los pazos del marqués de Ulloa para encargarse de la administración y se encuentra con un nido de pecado. El marqués vive amancebado con la criada y el padre de ésta es el que hace y deshace. Julián intentará que el marqués vuelva al camino recto haciéndo que se case con una prima suya, pero la carne es débil y las cosas no se arreglen tan fácilmente. La recien casada descubre que su marido tiene un hijo con la criada -Perucho- y es el comienzo del drama. Lo más destacado es la crítica al ambiente rural, alejado de falsos paraísos bucólicos y retratado como lo que muchas veces suele ser; un nido de odios y un ambiente tremendamente hostil. No es difícil adivinar la opinión que tenía la autora del campo. Por otro lado, mientras los viejos aristócratas van cayendo en decadencia, los aldeanos van tomando las riendas de los pazos. No sé muy bien qué lectura dar a…
RBA, 2007. 220 páginas. La voz del pueblo Emilia Pardo Bazán fue una adelantada a su tiempo, y una excelente novelista. Gracias a la colección RBA y su gusto por la novela del XIX voy a tener el gusto de poder leer una buena selección de sus obras. Y como siempre me pasa, me encuentro sorpresas muy agradables. La tribuna es el apodo de Amparo, hija de un barquillero y una cigarrera que gracias a la casualidad consigue trabajo en la misma fabrica de tabaco que su madre, ahora impedida. Estamos en una época convulsa de España, la república parece inminente, y mucha gente del pueblo cree que llegará una época dorada en la que las desigualdades desapareceran. Amparo es una de ellas, y tan fervorosa es su pasión que se gana el apodo de La tribuna. Su gallarda figura consigue que se fije en ella un señorito bien que hasta le promete matrimonio. Me vienen a la mente muchos refranes, pero entre que son salidos de tono, y que estropean el final, me los callo. Como buena novela naturalista hace un estupendo retrato del pueblo en un momento agitado de la historia. La huelga de la fábrica, las necesidades…