Astiberri, 2023. 260 páginas. Ante la inminente destrucción de la tierra por un meteorito el arquitecto Yorba deberá enfrentar su destrucción particular y enfrentarse a sus propias contradicciones. Cada cómic de Rubín es un acontecimiento y este no es una excepción. De formato gigante, para poder disfrutar en una calidad excelente del dibujo y con una edición exquisita. El tema que lo articula no es excesivamente original y, en mi opinión, la trama no está especialmente conseguida. Ni por el protagonista, ni por lo que le pasa, ni por el arco narrativo. Pero no importa, porque es una excusa para que Rubín despliegue todo su arsenal como dibujante, creando páginas que tienen textura propia, con variedad de formatos, estilos de ilustración, viñetados alternos, una delicia a la vista que es por lo que merece la pena leer (y leer de nuevo, sobre todo las últimas páginas) este cómic. Muy bueno.
Astiberri. Pura delicia. La aguda crítica social de Prior con los alucinantes dibujos de Rubin. Goce estético y cerebral. Cada una de las páginas es para contemplar. Primero, por la calidad de los pinceles de Rubín. Después por el formato, que integra en muchos casos la estética internet que tanto le gusta a Prior y que tan bien encaja en la historia. Por último por los mensajes que se esconden en cada una de las esquinas, teóricamente de un futuro neoliberal oscuro, en la práctica de la realidad cotidiana en la que vivimos. Mi única pega es la que suelo tener con las tramas de Prior, que no suelen conducir a ningún sitio. Y no es que haga falta, pero creo que cuando presente una historia redonda el resultado puede ser demoledor. Extremadamente recomendable.
Astiberri, 2017. 136 páginas. Un explorador que se mueve entre dos mundos, el real y un mundo de fantasía gracias a una singularidad que se encuentra en la ciudad de Venecia. A pesar del carácter mágico del otro mundo él aplica las reglas de la ciencia para solucionar los problemas. Es por eso que le encargan averiguar quién ha sido el asesino de la última llama dorada. Una trama atractiva sin grandes complicaciones y con mucha imaginación, sobre todo visual a cargo del excelente dibujo de David Rubin. Más orientado a un público adolescente que al adulto, aunque de vez en cuando es refrescante leer historias sin excesivas complicaciones.
Astiberri, 2014. Tenía muchísimas ganas de hincarle el diente a este cómic. La adaptación del poema épico de Beowulf a manos de Santiago García y David Rubin tenía, a priori, una pinta estupenda. Por una vez el resultado supera, con mucho, las expectativas. El argumento no se aparta del clásico: Beowulf es un héroe que derrota al monstruo Grendel, pero luego la madre de Grendel (más fiera) viene para vengarse y la derrota también. Por fin es coronado rey y mucho tiempo después tendrá que luchar contra un dragón junto a su sobrino. La planificación de las viñetas, exquisita. Las frases del guión, enmarcables (¿Por qué vienes a morir tan lejos de tu casa? Por la gloria eterna, señor. El oro se gasta, la vida se acaba, sólo la gloria es eterna). El dibujo, impactante. Cómics como este seguirán haciendo indispensable el papel, porque en ningún formato electrónico se pueden apreciar las inmensas páginas dobles (bueno, quizás con tablets de 30 pulgadas). Un lujo para la vista. Más reseñas: “Beowulf”, de David Rubín y Santiago García. y Beowulf (Santiago García y David Rubín) Calificación: Muy bueno.