Anagrama, 2020. 128 páginas. Un grupo de teatro universitario se va enfrentando a su día a día, combatiendo sus rutinas y a los infiltrados que se les cuelan, la sorpresa de los montajes de otros grupos afines y el montaje de su nueva propuesta. A medio camino entre la novela y el teatro, puesto que muchas de sus páginas son una descripción de cómo sería el montaje, toca algunos temas que aparecerán luego en Lectura fácil, tiene parecida fuerza, pero no admite comparación con esta última. Es una suerte que el éxito esté consiguiendo las reediciones de todas las obras de Cristina, que son una maravilla. Muy bueno. Ahora sé, porque me lo demostraron en el trascurso de los ensayos, que en ese momento me gané recelosos como Borja y el propio Pepe, pero también desperté simpatías inmediatas como la de Ahmed, que la hizo explícita saliendo sutilmente en mi defensa. Pero para chula, chula mi pirula, pensó Sara, y contraatacó abiertamente ofendida: que yo con mi postura corporal, repantigada en la silla, haciendo gala de mis botas militares y con la cabeza apoyada en el puño ya estaba hablando más que ninguno de los presentes que hablaban demasiado, empezando…
Anagrama, 2020. 208 páginas. En 1562, mientras Santa Teresa está alojada en el palacio de Luisa de la Cerda escribe su Libro de la vida. Pero a la vez está escribiendo otro diario, más íntimo y sincero, que la autora nos trae a la luz. La autora lo escribió por encargo y como tal tuvo que sufrir recortes e imposiciones que se detallan en un prólogo que es tan sabroso como el libro mismo y del que dejo un extracto. En esa época no era la escritora consagrada que es ahora y a la que, por fin, se le permite expresar su propia voz. Que sea un encargo y sobre una santa no impide que Cristina nos hable de empoderamiento de las mujeres (recordemos que Santa Teresa se hizo monja porque no quería casarse y convertirse en una fábrica de hijos), denuncias al trato de la mujer como objeto, retratar las faltas de la supuesta democracia actual disfrazada en la elección de un convento y hasta meter de tapadillo letras de Kortatu. Y todo esto, además, muy bien escrito, que no hace falta que lo diga yo ni que lo diga ahora que lo sabe todo el mundo, pero así…
Anagrama , 2018, 2019. 424 páginas. Cuatro mujeres discapacitadas viven en un piso tutelado en Barcelona, después de haber pasado una parte de sus vidas en residencias para personas con discapacidad intelectual. Una serie de acontecimientos va a poner en peligro su modo de vida. Nada me alegra tanto que tener que celebrar un libro ya celebrado, con varios premios a sus espaldas y que siendo tan bueno no es desconocido. Posiblemente por su carga ideológica, que habrá contribuído a hacerlo famoso. Pero tiene calidad, vaya si la tiene. Sería difícil hacer una lista de las virtudes del libro porque me ha gustado todo. Fondo y forma. Ideas y trama. Personajes y escenas. La búsqueda de los espacios de libertad, la necesidad de poder ser diferente, sin que te integren, la necesidad de escapar de los marcos de poder establecidos. Cuando un libro me hace reir a carcajadas en una página y llorar en la siguiente, es un buen libro. Cuando lo dejo en la mesilla porque el sueño me derrota y lo sigo leyendo en la cabeza, es un buen libro. Cuando discuto internamente con los personajes y me da rabia porque no me contestan, es un buen libro….