Ediciones B, 2016. 412 páginas. Trad.: Javier Altayó. Prominentes científicos parecen estar suicidándose sin motivo aparente. Un juego de realidad virtual sobre un extraño planeta con tres soles acapara la atención de la gente. Los recuerdos de una física de alto nivel en los tiempos de la revolución cultural y su participación en un proyecto secreto que parece haber tomado contacto con los extraterrestres puede tener la clave para resolver el misterio. Ha sido el gran acontecimiento de la temporada y lo han recomendado personajes tan eminentes como Obama y Zuckeberg. De lo que saco en conclusión que el mal gusto está en todos los estratos de la sociedad. Es un libro bastante malo. No del todo, las partes que hablan de la revolución cultural, la represión de los intelectuales y los campos de reeducación están muy bien. Me pusieron los pelos de punta. Pero el resto, la parte de ciencia ficción… es realmente muy mala. Es mala no sólo porque la ciencia que está detrás no tiene ni pies ni cabeza. Ni porque muchas de las situaciones sean bastante inverosímiles (sí, la ciencia ficción también debe tener verosimilitud). Ni siquiera por el abuso del deus ex machina que alcanza…