Anagrama Contraseñas, 1988. 118 páginas. Corrosivo Mi admiración por Vidal-Folch comenzó con estos relatos, que antes de en este libro leí en la revista Star. La lista es la siguiente: Ilíada Mi visión del mundo Una canita al aire Lenin y Rasputín Mensaje hallado en un coche El amor a los tebeos El arte no paga Nostalgia Mi amigo Hidalgo Otoñal Queda gente por detener No tienen desperdicio. Todos son muy buenos, desde el desmadre sangriento de Una canita al aire hasta el retrato de la chica carne de secta de Queda gente por detener. Es muy raro que un libro despierte carcajadas, y este lo consigue. No solo no ha envejecido, sino que sigue siendo igual de actual. Calificación: Indispensable. Un día, un libro (46/365) LENIN Y RASPUTIN —un documento histórico— Han transcurrido muchos años desde los acontecimientos que me dispongo a narrar, han fallecido todos sus protagonistas, y creo que ésta mi modesta crónica no entorpecerá los gloriosos logros de la Revolución. Y aunque los entorpeciera, ¡tampoco es cosa de ocultar al lector maduro cuan poco faltó para que el inmenso esfuerzo de la Revolución se malograra… por unas copas de más bebidas en una taberna de San…
Anagrama, 1996. 240 páginas. Cambiar la ley de los hombres Mi mujer se estaba pensando comprar este libro en el mercado de San Antonio, cuando disipé sus dudas comprándoselo yo y pensando que si a ella no le gustaba igual me gustaba a mí. Como suele pasar lo leí yo antes y le dije que no lo dejara pasar. Que era muy bueno. La lista de los cuentos es la siguiente (sacada de aquí: Madres e hijas: «Chinina Migone», de Rosa Chacel (también aparece en el libro Sobre el piélago) «Al colegio», de Carmen Laforet (figura en la obra La niña) «De su ventana a la mía», de Carmen Martín Gaite (publicado por primera vez en Desde la ventana) «Cuaderno para cuentas», de Ana María Matute (viene del libro Algunos muchachos) «Espejismos», de Josefina Aldecoa «Carta a la madre», de Esther Tusquets «Primer amor», de Cristina Peri Rossi «Ronda de noche», de Ana María Moix «La hija predilecta», de Soledad Puértolas «Cari junto a una motocicleta roja» de Clara Sánchez «La niña sin alas», de Paloma Díaz-Mas «Ella se fue», de Mercedes Soriano «La buena hija», de Almudena Grandes «Mi madre en la ventana», de Luisa Castro La selección tiene…
Anagrama, 1983. Educación sentimental Tenía ganas de leer algo de Pombo, convertido en personaje mediático -aunque no le siga por la tele. Encontrar de saldo este libro, que es el primer premio Herralde de novela, ahora todo un clásico, ha sido una suerte como lector y como bibliófilo. En las mansardas de una casa bien se van desarrollando las múltiples historias que conforman este fresco de la alta burguesía de la posguerra. Su tía Eugenia sobrelleva como puede su juventud perdida en la carne pero no en el espíritu, Julián, contratado como criado pero que esconde un turbio pasado de sexualidad incierta, y frente a todo, Kus-Kus, el niño de la casa que sufrirá una acelerada educación sentimental. Muy buen retrato, impecable escritura, sólidos personajes, y aún así me dejó un poco frío. Me ha mejorado en el recuerdo, pero me sigue sabiendo a poco. Aunque al principio se me hizo un poco aburrido, remonta el vuelo y además de un estupendo retrato social nos dibuja unos personajes esclavos de sus pasiones que son intemporales, y que en un ambiente opresivo de represión moral malviven como pueden. Agridulce y tierno. Para compensar mi escaso comentario tampoco hay nada en la…
Editorial Anagrama, 2004-2008. 158 páginas. Duelo Es un lugar común decir que se hacen muchas películas de la guerra civil. Puede que debiera ser extensivo para los libros. Pero no estoy de acuerdo en ninguno de los dos casos. Sería como decir que se hacen muchas películas que traten del amor, o que transcurran en Nueva York. Alberto Méndez murió sin saber el éxito que tendría su libro. Toda muerte es una tragedia, pero morir al inicio de una carrera prometedora también lo es para los lectores. Porque los cuatro relatos incluídos en este voleumen presagiaban futuros libros de calidad. La lista es la siguiente: Si el corazón pensara dejaría de latir Un capitán de intendencia franquista se rinde al enemigo justo cuando las tropas de Franco están a punto de entrar en la capital. Manuscrito encontrado en el olvido A través de un manuscrito encontrado en una cabaña se reconstruye la tragedia de un hombre que intentaba huir a Francia y al que el invierno atrapó con su hijo recién nacido. El idioma de los muertos Un prisionero salva su vida por haber conocido al hijo del coronel que le está juzgando. Los girasoles ciegos Después de la guerra…
Editorial Anagrama, 1995. 144 páginas. Círculos obsesivos Me gusta Tizón, me gusta su prosa y su libro Velocidad de los jardines es de una extraña perfección. Pero esta Seda salvaje no me ha acabado de convencer. La prosa es impecable, y lo mejor del libro. Sólo por eso merece la pena leerlo. Pero la novela no acaba de cuajar, el obsesivo protagonista empeñado en descubrir lo que hace su novia por vía de un detective a ratos resulta increíble y el desarrollo de la historia no tiene mucho sentido. Como dice el protagonista en el libro: Llegué a casa y me encerré a solas con el informe. Volvía sobre sus frases con el ánimo de quien vuelve a un lugar incómodo pero a salvo, donde los peores augurios son confirmados. Cada palabra escondía una ocasión de peligro y eran terreno minado sus acrobacias verbales. Repasándolo mejor, llegué a pensar en nosotros como en entes de ficción producidos por un autor de segunda; pero quizá el novelista que nos ideó había muerto olvidado y quedábamos nosotros huérfanos en medio de la calle, en medio de un capítulo, personajes sin guión persiguiéndonos unos a otros por apeaderos y altares en una mala…