Institut del teatre, 1988, 1997. Biblioteca teatral. 89 páginas.
Premio Ignasi Iglesias 1987.
3 personajes. 3 mujeres.
Pequeña obra maestra
Sigo con restrasos, pero mi piso va quedando mejor. Ya nos iremos poniendo al día.
Esta obra tuve la suerte de verla hace ya unos años, cuando Belbel ya tenía cierta fama. Lo que pasa es que soy tan zanguán para los nombres que no me acordaba del autor, aunque he leído otras obras suyas. Estuvo muy bien, aunque el trabajo de dirección dejaba algo que desear; pero las actrices eran muy buenas y el texto, magnífico.
El prólogo del libro está muy bien; es de cuando el autor estaba empezando, y da gusto comprobar como Joan Castells da en el clavo; le augura un brillante porvenir y no se equivoca. Porque Elsa Shcneider es un texto clásico. Teatro del bueno, original, en la onda de Sinisterra, con texto, escena, reflexiones, y todo lo que hay que tener. ¿Hace falta que diga más para que se note que me ha gustado?
La obra se compone de tres monólogos. En el primero vemos la dramatización del cuento ‘La señorita Elsa’ de Schnitzler, autor que, después de leer en esta misma colección ‘La ronda’ me lo encuentro por todas partes (y del que no sabía que la película ‘Eyes wide shut’ estaba basada en un cuento suyo). Si la obra de Schnitzler me gustó, la dramatización de Belbel de su cuento todavía más; una joven señorita de buena sociedad del siglo XIX se ve obligada por su familia a pedir dinero a causa de las deudas de su padre. El señor von Dorsday, al que le pedirá el dinero, le pedirá a cambio que se acueste con él. El desenlace será trágico. Todos esto contado como un monólogo interior, no onírico como el de Joyce, sino bien estructurado. El resultado es una pieza de gran dramatismo y con mucho juego teatral.
El segundo monólogo tiene como protagonista a Romy Schneider y, aunque inferior en mi opinión al primero, nos va mostrando diferentes momentos de la vida de la actriz; desde su adolescencia y primeros éxitos como Sissi Emperatriz, hasta su decadencia y suicidio. Escenas breves y cortantes nos muestran a una mujer descarnada.
Y en el último monólogo se cambia de tercio; Elsa Schneider, una ‘fusión’ de la señorita Elsa y Romy Shcenider, entra dentro del metateatro y plantea al público varias reflexiones acerca del hecho teatral. Cuando vi la obra, este personaje se interpretó casi como si fuera un clown y, leyendo el texto, lo considero un error.
Sergi Belbel se ha convertido en el dramaturgo catalán más traducido e interpretado en todo el mundo, y según mi opinión, merecidamente. Esta obra empezó a cimentar su éxito. No dejen de leerla.
(Un día, un libro 122/365)
Escuchando: ‘En el campillo’. Ofunkillo
3 comentarios
Enhorabuena por tu bitacora, la acabo de descubrir y estoy hojeando el área de novelas.
He visto que citabas en varias ocasiones los «mercadillos» y «las librerias de viejo» donde compras los libros a buen precio. ¿Tienes algún post dedicado a ellos?
Enhorabuena por tu bitacora, la acabo de descubrir y estoy hojeando el área de novelas.
He visto que citabas en varias ocasiones los «mercadillos» y «las librerias de viejo» donde compras los libros a buen precio. ¿Tienes algún post dedicado a ellos para que podamos tomar nota los que nos gusta compra libros?
Muchas gracias.
Me parece una idea excelente. Lo haré pero claro, de la ciudad de Barcelona.