La noticia de su fallecimiento me pilló de vacaciones, aunque era de imaginar ya que estaba en su domicilio con cuidados paliativos (me resisto a hacer el juego de palabras con el título de una de sus novelas). Dejo como homenaje esta foto de cuando por Barcelona podías encontrarte a los mejores escritores de su generación y no a una horda de turistas ocupando las ramblas. De cuando era la capital de la literatura y no del Mobile World Congress:
Que la tierra le sea leve.
3 comentarios
Qué mal que no sea ya eso que mencionas! Gracias por la imagen.
Estaré en Barcelona en junio. Espero conocerte 🙂
Estaré encantado 🙂
Hay determinados momentos en los que se dan en una ciudad o en un barrio las circunstancias para que haya algo así como una efervescencia cultural. Esa foto es el reflejo de uno de los momentos más creativos literariamente hablando para Barcelona.