Ya reseñamos aquí Hierático otra novela del autor también ambientada en una Barcelona distópica. Aquí nos encontramos lo mismo elevado a la décima potencia. En esa Barcelona del futuro hay una Casa de Alivio que parece ser una inteligencia artificial que domina a los ciudadanos en un ambiente convulso. Tres personajes se enfrentan a problemas de naturaleza muy dierente. Fátima Astruc sufre la muerte de su naturópata, su hermano Deán Astruc parece intentar sabotear la Casa de Alivio y Cristina Sacanera sufre su condición de Santeta del Poblesec.
Tenemos aquí un lenguaje más enrevesado, críptico, lleno de palabras sugerentes y perífrasis morosas. Que tiene momentos muy buenos, pero que en general me ha parecido demasiado de todo. Excesivo. Es un libro de estos que amas u odias y yo me quedo a medio camino, me gusta el riesgo y la experimentación, que lo hay en abundancia, pero echo de menos alguna pista más para orientarse en el laberinto.
Recomendable, pero no para todos los públicos.
Ciento treinta y ocho hombres y mujeres rana, ustedes, aparecerán en el edificio de Fátima como la plaga mondada en el patio de recreo de la Casa. Darán golpes y derribarán cercas según irán llegando desde los puntos cardinales de la ignominia a la que la Casa someterá a la ciudad. Un recordatorio. Ciento treinta y ocho recordatorios en los ojales de los vecinos de Fátima. Ampliarán la lástima y el terror que los habitantes de la primera planta le tendrán al firme urbano, con todo lo cerca de él que estarán. Un hombre rana degollará al señor López y mordisqueará a la señora López los lóbulos de las orejas en las pausas mientras le recite al oído una alternativa batracia al Bardo Thodol. Ustedes, ciento treinta y ocho, disuadirán a los de la planta doce de defender sus cuatro propiedades materiales, las de la joven pareja de compañeros de piso y las de la mujer sola con su hijo y las del matrimonio de jubilados al que una sobrina estará visitando esa tarde, porque a ninguno de ustedes, de los ciento treinta y ocho restaurados por el mar, les atraerá el catálogo de infamia homogeneizadora de la fe en los cachivaches baratos que les irán saliendo al paso, que los Estudiantes, la Desatendida, los Ancianos y la Sobrina les arrojarán, a ustedes, a sus agresores y asaltantes y abusadores, en vano intento de repelerles. No, no, no… Los ciento treinta y ocho hombres y mujeres rana estarán ahí por la carne y por el tacto; sobre todo, por el tacto. Inmovilizarán a los Ancianos y les acariciarán los cabellos ralos y canos con las lenguas. Penetrarán como abrelatas en la
Sobrina; sacarán sus rabos y chochos y los empastarán en el esfínter de ella, en la cara interna de las rodillas de ella, en la boca y en los párpados de ella y en su diafragma. Roerán ustedes los tobillos de los Estudiantes y les forzarán a orgasmar usando tenacillas y botellas de refresco y la rosca de una bombilla rota. Muchos de los ciento treinta y ocho se comerán la pasta de dientes de la Desatendida y su hijo; otros se llevarán al niño y lo echarán a rodar por las escaleras, abajo, al mar desbordado; otros cuantos retendrán a la mujer contra su sofá, el de ella, escay beis y aluminio, usando cinta aislante y cola de contacto, y la amordazarán con paños de cocina y restregarán sus babosas mejillas, las de ustedes, contra las de ella, ronroneantes ustedes y desquiciada de dolor demente la Desatendida. El tacto y la carne y la carne y el tacto. Hurgarán ustedes en los bolsillos de los solos y los acompañados en la planta veinticinco, en la treinta y tres, en busca de tacto y pertenencia, desvalidez nutriente y otras formas de permutar la invasión de la intimidad, solo un poco distintas a las formas de los cordoncitos de luz de la Casa de Alivio. Serán, los ciento treinta y ocho hombres y mujeres rana, retoños de la Casa al fin y al cabo; que no se les olvide.
2 comentarios
Yo he leído Hierático este año y aun con sus defectos, no me disgustó del todo. Esta que reseñas hoy tiene un título arrebatador. Ha sido verla en mi feed de blogs habituales y tener que verir a ver de qué trataba con una urgencia incontenible. A ver si la encuentro en alguna biblioteca o de segunda mano.
Búscalo, porque merece la pena. Creo que se pasa de retorcido, pero tiene páginas e imágenes deslumbrantes. Si vas a fallar que sea por exceso.