Editorial Anagrama 1996. Traducción de Mauricio Bach.
Tit. original: Try 1994. 217 páginas
Mucho ruido y pocas nueces
Para empezar en la contraportada nos informan que el autor es el más transgresor de los escritores políticamente incorrectos. Malo. Ya tengo la sensación de que intentan vederme la moto. Además, cuando leo estas cosas se me enciende una vena chulesca del tipo ‘A mí no me impresiona ná que estoy de vuelta de tó’. Pero bueno, no nos dejemos vencer por los prejuicios y vayamos al libro que es lo que nos ocupa.
Y es que este libro lo compré pensando que era de otro autor (Coover) que me gusta bastante. Pero como soy un poco mendrugo, pues no me di cuenta (no es la primera vez que me pasa; compré un libro de Jose Antonio Millan pensando que era de Juan José Millás, sólo que en ese caso el libro era excelente, con lo que conocí a un nuevo autor -para mí-, y una estupenda página web ), y a medida que iba leyendo el libro decía para entre mí: ‘Hay que ver lo que mejoró después el autor, quien diría que el autor de estas páginas escribiría luego tan bien’. Hasta que se me ocurrió comparar el nombre y caí en la cuenta del craso error.
El libro tiene por protagonista a Ziggy, un adolescente adoptado por una pareja de gays separados, que vive con uno de ellos que es maltratador y violador, tiene un tío que rueda películas porno con menores y su mejor amigo es un novelista yonqui. Para contradecir a los defensores del ambientalismo, este estimulante entorno solo consigue que esté un poco confuso acerca de su identidad sexual y que escriba un fanzine ‘Pido perdón’ sobre niños violados y maltratados (si el libro se hubiera escrito 10 años después escribiría una bitácora ;)). hay unas cuantas historias paralelas, unas acerca de gente que busca el amor y otras acerca de gente que busca la perversión. Y poco más. Si, hay escenas truculentas que no es cuestión de desvelar, pero poca chicha. El morbo utilizado como medio puede dar alguna obra maestra. Utilizado como fin sólo da para un libro normalillo sin mucha gracia.
Además el libro es de los que tiene moralina encubierta. No se si se referían a eso cuando hablaban de ‘políticamente incorrecto’. Le encantará a los defensores de ‘la moral de toda la vida’. Todos los homosexuales que aparecen en el libro son de pedófilos para arriba, la adopción de Ziggy por la pareja acaba en un sonoro desastre (ya se sabe que los gays no deben adoptar hijos) y el heroinómano acaba en una espiral destructiva totalmente desoladora (única moralina del libro que aplaudo; la heroína es cosa seria).
En definitiva, si te encanta devorar libros y quieres añadir un cromo raro a tu colección; adelante. En caso contrario hay libros mejores en los que perder el tiempo.
(Un día, un libro 4/365)
8 comentarios
Offtopic
¿Qué te parece el nuevo Manifiesto por la liberacion de la cultura? Creo que tú sí puedes ser una voz autorizada al respecto.
Un saludo.
Pues tengo sentimientos encontrados al respecto… y eso que soy de izquierdas.
Prometo un post sobre el asunto.
Me acabo de comprar un libro de Stuart Mill… prepárate!!!
Ja ja ja ja…
Tengo que reconocer que John Stuart Mill es muy bueno, a pesar de que no comparta sus ideas (le llegué a dedicar dos posts, incluso). Me parece un tío… pues como Marx o Keynes… hombres extraordinarios.
Por el contrario, yo me estoy leyendo «El guardián entre el centeno», de Salinger. Se lee rapidísimo… Prometo mandarte reseña.
Saludos.
La espero, entonces.
De Keynes me acabo de leer un libro que reseñaré por aquí con un extracto anti-liberalismo muy interesante 🙂
HUM, así que pecando de liberal, Palimpillo, te he pillado!!! JEJEJE
Yo corro a mirar lo de culturalibre, jiji.
Y mi pregunta es: ¿cómo leches consigues acabar un libro que no te gusta…? Yo es que los tiro a la piscina en menos de ná…
Norrrr, ANTES MUERTO QUE LIBERAL!!!!
Los acabo porque tengo una disciplina de hierro.
Dennis Cooper es un grna amigo mío, para nada focaliza desde su vida los fantasmas internos,como muchos se han atrevido a advertir. Es respetuoso, frágil en su escritura, y un dictador en seccionar en carne la propia oralidad.Un abrazo
Yo no he advertido la focalización de sus fantasmas. No lo considero respetuoso -al menos en este libro- ni de escritura frágil. ¿Podrías explicarme que quieres decir con ‘seccionar en carne la propia oralidad’?
Un abrazo.