Planeta-De Agostini, 1985. 328 páginas.
Tit. Or. Magic, science and religion, and other essays. Trad. Antonio Pérez Ramos.
Ya comenté en la reseña de Historia de la sociología que no sé nada de esta disciplina, pero que quiero aprender. Qué mejor que ir a las fuentes, a uno de los pioneros de la antropología tal y como se entiende ahora: Malinowski.
Los ensayos recogidos en este libro están escritos en 1948, y seguro que estarán superados por teorías más refinadas y observaciones más precisas. Pero un novato como yo agradece empezar por el principio, sobre todo si los ensayos son asequibles para no especialistas.
El libro incluye, además del que da título al libro, el ensayo El mito en la psicología primitiva y un breve artículo sobre los espíritus de los muertos en las islas Trobiand. Malinowski despliega sus tesis apoyado en una gran cantidad de datos recogidos sobre el terreno.
Coincido con el autor cuando expone que magia, ciencia y religión no son esferas separadas de la actividad humana, sino que comparten un origen común. No podría ser de otra manera si provienen de la misma fragua, el cerebro humano, y probablemente por el mismo motivo: controlar el entorno cambiante que nos rodea.
Me ha gustado mucho la observación de que cada actividad de las tribus estudiadas tiene asociado un ritual. Así, antes de plantar la cosecha o de fabricar una barca hay una serie de pasos mágicos que hay que realizar. Pero esto no quiere decir que se confie exclusivamente en el ritual para conseguir el éxito; el ejecutante sabe que sin aplicar los conocimientos adquiridos -podríamos llamarlos tecnológicos- la magia no sirve para nada. También que las actividades más sujetas a la fortuna son las que tienen más rituales o en las que éstos tienen más importancia. Haciendo un paralelismo con nuestros días no deja de sorprender que las profesiones que más dependen de la suerte -actores, toreros, futbolistas- tienen también más supersticiones.
Como puede verse su antigüedad no le ha restado capacidad para incitar a la reflexión. Muy recomendable.
Escuchando: Never Had a Love Like This Before. Tavares.
Extracto:[-]
Pero incluso con todo su sistemático conocimiento metódicamente aplicado están a la merced de mareas incalculables y poderosas, de temporales repentinos en la estación de los monzones y de desconocidos arrecifes. Y aquí es donde entra en escena su magia, que se celebra sobre la canoa durante su construcción y que se continúa al comienzo y fin de singladura en momentos de auténtico peligro. Si el marinero de hoy, entrenado en ciencia y razón, con previsión de toda suerte de instrumentos de seguridad y navegando en buques de acero, si incluso él tiene una singular tendencia hacia la superstición —que no le despoja de su conocimiento o razón ni le hace enteramente prelógico—, ¿podernos acaso maravillarnos de que su salvaje colega, en condiciones más precarias, y con mucho, recurra a la seguridad y alivio de la magia?
La pesca y sus ritos mágicos de las islas Tro-briand nos proporcionan aquí una prueba que, además de interesante, es crucial. Mientras que en los poblados de la laguna interior la pesca se lleva a cabo de manera fácil y absolutamente confiada mediante el método de envenenamiento de las aguas, que produce resultados abundantes sin peligro ni incertidumbre alguna, existen a la orilla del mar abierto peligrosos modos de pesca y también ciertos tipos en los que la captura varía sobremanera de acuerdo con el evento de si hay bancos de peces que aparecen de antemano o no. Es del todo significativo que en la pesca de laguna, en la que el hombre puede confiar por entero en su conocimiento y pericia, la magia no existe, mientras que en la pesca de mar abierto, preñada de peligros o incertidumbres, se haga uso de un extenso ritual mágico para asegurar protección y resultados prósperos.
Asimismo, en la guerra, saben los aborígenes que la fuerza, la valentía y la agilidad representaba un papel decisivo. Sin embargo, también aquí practican la magia para domeñar los elementos de la suerte y el azar.
11 comentarios
Si yo cobrase 7 millones de euros (libres de impuestos) por jugar 38 partidos de liga y 12 o 14 de champions también me volvería supersticioso. Le rezaría a todo dios para que no se acabase el chollo.
¿La predisposición al pensamiento mágico puede suponer una ventaja evolutiva para la supervivencia?
Yo creo que no, pero entonces ¿Por qué coexiste la superstición con el pensamiento racional en nuestra sociedad?
Acabo de descubrir este blog y es, sinceramente, de lo mejor (y lo más honesto, ya está bien de tanta bitácora vacua) que me encontrado en mucho tiempo.
Por cierto, lejos de querer hacer publicidad gratuita, os dejo, para aquellos que os pueda interesar, un enlace a mi foro de literatura, donde llevamos a cabo un concurso semanal de relato corto, entre otras actividades literarias.
El rincón de Sherezade
La predisposición al pensamiento mágico no es una ventaja evolutiva pero ¿qué es el pensamiento mágico?
Vivimos en un mundo que es en muchas cosas regular. Por lo general todo lo que ocurre sigue una relación de causa-efecto. El cerebro humano ha sacado partido de ello; tiene menos instintos pero más capacidad de aprendizaje. Es capaz de ver las relaciones causales, aprenderlas y obrar en consecuencia.
Pero ¿qué ocurre cuando no hay una relación causal o es tan retorcida que no podemos verla? Que nuestro cerebro sigue empeñado en buscar donde no hay. Un ejemplo aclarará la cuestión. Si estoy jugando al parchís puede que pasen muchos turnos antes de obtener un cinco para poder sacar una ficha. Lo más normal sería pensar Es cuestión de suerte, si no sale es totalmente normal desde el punto de vista probabilístico. En lugar de eso pensamos que tenemos mala suerte, que estamos gafados, que el dado no saca cincos -y queremos cambiarlo-… Nuestra mente se resiste a no tener una explicación.
Este es el origen del pensamiento mágico, que no es ni más ni menos que el mismo pensamiento que nos permite deducir que si tiro una piedra contra un cristal y se rompe la culpa es de la piedra. Cuando nos enfrentamos a fenómenos prácticamente aleatorios el sistema falla y se habla de magia.
jdniro, gracias por los piropos y visitaremos vuestro rincón que será, sin duda, muy interesante.
Palimp, muchas gracias, allí os esperamos.
Respecto a la cuestión que planteas, o que plantea el ensayo, coincido plenamente en que la magia, la religión, así como toda cuestión relaccionada con las manifestaciones no físicas, son producto del intelecto humano, en tanto que suponen una necesidad para dar sentido al universo «inexplicable» que rodea a los individuos.
De eso se han nutrido diferentes estamentos tanto sociales, como políticos y de otra índole a lo largo de los siglos y esa, precisamente, es la gran debilidad del ser humano. Aunque esto nos lleva directamente a otras cuestiones que no son las debatidas aquí y que harían florecer mi odio hacia la entidad más rastrera que ha existido en la historia (y no doy nombres…)
… pero nos lo imaginamos.
Sin duda alguna una muestra loable de tu texto sentido. Me he servido de alguna información sobre Malinowski, muchas gracias. Vaya, en verdad que idolatras los libros. Y como decía Louise May Alcott : Un buen libro es aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho». Así también me permito calificar a tu blog. Felicitaciones, y ¡que no mueran los libros!
¡Gracias!
Les agradezco la oportunidad de poder compartir sus recusos con todos los que encontramos aquí lo que buscamos
Pues no hay de que.