Ediciones B punto de lectura, 2003. Trad. Pedro Jorge Romero.
Tit. Original: The moon and the sun, 1997. 597 pág.
Malo con correa
Viendo el contenido de la contraportada esperaba encontrarme con una descripción pormenorizada de las intrigas en la corte del Rey Sol, aligerado con algunos toques de ciencia ficción o fantasía. Algo así como un Dune ambientado en Francia. La obra no me decía mucho, pero al tener un Nébula decidí arriesgarme. En que hora.
Se trata de la peor obra de ciencia ficción que he leído en mucho tiempo. El que dijo que no había libro tan malo que no se pudiera obtener algún provecho, no había leído éste. No tiene absolutamente ningún interés.
La historia es sugerente. En la corte de Luis XIV un jesuíta ha conseguido traer vivo a un ‘monstruo marino’ muy particular: una sirena. El rey cree que podrá obtener la inmortalidad de alguna glándula de ese ser, pero la hermana del jesuíta, recién introducida en la corte, descubrirá que la sirena es inteligente e intentará impedir que acaben con ella.
Podría haber sido un libro decente, pero no lo es: es infame. La historia pierde interés (si es que alguna vez llega a tenerlo) a partir de las 60 primeras páginas (y todavía quedan más de 500). Los personajes son de cartón piedra, totalmente patéticos y nada creíbles. Acabas cogiendo manía a los protagonistas y a desear que maten al monstruo marino, al jesuíta, a la hermana, y a toda la corte. El estilo es de best-seller de la peor calidad (Sí, hay best-sellers decentes, Stephen King lo es, pero sus personajes son consistentes -y me acuerdo de la escena de ‘la zona muerta’ cuando va el vendedor de pararrayos a vender uno al bar donde se celebrará el baile. En una página consigue hacerme creer al vendedor, al dueño y hasta a los parroquianos del bar, en este libro no te crees a nadie-).
Los que sigan habitualmente esta bitácora sabrán que en raras ocasiones critico con dureza algún libro (en parte porque uno va seleccionando sus lecturas), pero este es insalvable desde cualquier punto de vista. Dentro de esta misma editorial, y tratando también de una historia ‘alternativa’, leí hace poco ‘La locura de Dios’, y uno se pregunta como los lectores de ciencia ficción podemos seguir teniendo prejuicios contra los escritores ‘de casa’ cuando ‘La locura…’ le da mil vueltas en estilo, calidad, e interés a esta bazofia.
No se dejen engañar por el Nébula (¿No se presentó nadie ese año?) y no lo lean, sus neuronas se lo agradecerán. Greenpeace debería denunciar a la editorial por haber talado tantos árboles para tan ignominioso fin. Horrible.
P.D. Menos mal que el libro que postearé en breve ‘Los sueños del canciller’ consiguió quitarme el mal sabor de boca.
(Un día, un libro 173/365)
Escuchando: Nada, me voy corriendo a coger el autobús a Logroño.
5 comentarios
Desgraciadamente hay libros muy malos, y siendo así, no queda más remedio que poner cada obra en su lugar. Que no te dé pudor criticar lo criticable. Ánimo.
¿Y no será la traducción?
El nombre de este libro me va perfecto!
Ahora mismo estoy eclipsado!!!! Y todos los lectores de la península probablemente también.
#1 No me gusta criticar, y menos con dureza, pero este libro lo compre nuevo y me dio la sensación de que me habían robado… Gracias por los ánimos.
#2 No creo que sea la traducción por varias razones. Primero, aunque no soy capaz de evaluar si Pedro Jorge ha realizado en este caso un buen trabajo, he leído otros libros traducidos por él y me han gustado. Creo que es un buen profesional. Segundo, la ciencia ficción no se caracteriza por tener excesivos alardes estilísiticos; una mala traducción tampoco poría hacer excesivo daño. Por último, ni la más excelsa prosa salvaría la infumable trama argumental de este libro. Es una opinión, nada más.
Mezcal, totalmente sincronizado 🙂