Edhasa, 2013. 1210 páginas. Tit. or. Les miserables. Trad. Andrés Ruiz Merino y Elena Sandoval. Jean Valjean es un exconvicto al que la bondad de un obispo endereza y que tras labrar una inmensa fortuna se verá perseguido por el comisario Javert, un policía empeñado en meterlo en presidio. Por el camino, digresiones sin fin. ¡Vaya libro! Todo es desmesurado. Sus aciertos y sus errores. Sus divagaciones sobre infinidad de temas que no se ventilan en un par de párrafos, sino que ocupan capítulos enteros. Es muy complicado en las breves entradas que dedico a los libros no solo ya resumir sino contar todas las impresiones que me ha causado. La trama, por ejemplo. Entretenida y dinámica, sí, pero con momentos que no hay por donde cogerlos. Las cosas se limitan a pasar sin prácticamente ninguna coherencia interna, y no digamos ya las múltiples casualidades que hacen que cuatro o cinco personajes se crucen allá donde estén como si tuvieran un imán. Todo, además, muy romántico y de sentimientos exaltados, con momentos que se suponen patéticos pero que me han arrancado alguna carcajada involuntaria. Los personajes, de trazo muy gordo. Todos son muy buenos, o muy malos, o muy fogosos,…