Alianza, 2009. 550 páginas. Mira que había oído hablar de este libro y nunca me animaba a leerlo. Me costó encontrarlo en la biblioteca y en el ejemplar que conseguí se iban soltando algunos pliegos. Pero ha merecido la pena ¡Menudo libro! Se trata de las memorias del autor en los primeros años del siglo XX. Ignoro si son escritas a posteriori, rememorando, o en el momento. Como mínimo unos buenos apuntes tendría porque las anécdotas y el fresco de la época parece pintado al momento. Estamos hablando de la época de Valle-Inclán, del influjo de Rubén Darío, de los comienzos de Juan Ramón Jiménez o Gómez de la Serna. Todos estos personajes aparecen en estas páginas, en zapatillas, ya que muchos ni siquiera eran famosos. Y aunque comencé a leerlo por esos nombres el libro me ha ganado por lo contrario, por aquellos que no alcanzaron la fama pero que el autor retrata con tanto cariño y tan buen ojo que sigues sus aventuras como si de una novela se tratara. Todos existen, gracias a internet he podido saber un poquito más de todos ellos. Hay otras dos partes iguales de difíciles de conseguir, pero me ha gustado tanto…