Varios. Cuentos de damas fantásticas.
Cuentos / abril 7, 2022

Páginas de espuma, 2002. 254 páginas. Incluye los siguientes cuentos: Estatuas sepultadas, Antonio Benítez La gabardina, Max Aub Sybil, Guillermo Samperio Alado objeto del deseo, José Fernández-Cavia El maniquí, Juan Carlos Ghiano Noche de ángeles ciegos, Félix J. Palma Muchacha de otra parte, Abelardo Castillo La bruja de la calle de Fuencarral,Alfonso Sastre Mal de ojo, Hernán Lavín Cerda Dodecafonía, Enrique Anderson Imbert La sortija y el sortilegio, Ana Rossetti La densidad de las palabras, Luisa Valenzuela Juana Rial, limonero florido, Rafael Dieste . . . En memoria de Paulina, Adolfo Bioy Casares Una carta, Mercé Rodoreda Los peligros de Paulina, Salvador Garmendia Silencio de sirenas, Marco Denevi Donde las leyendas, Josan Hatero La muñeca menor, Rosario Ferré La sirena. 1541, Manuel Mujica Lainez Madan Clotilde, Adriano González León El despertar, Antonio López Ortega Auto de la mujer barbuda, Alvaro Cunqueiro . Cuento de horror, Juan José Arreóla En general bastante normalitos. Se deja leer. Cuando llegamos a la casa dijo que tenía mucho sueño, que se acostaba temprano, y agarrando una vela entró muy decidida en el cuarto del abuelo, al final del corredor, encerrándose por dentro como si lo conociera. El hombre -porque hoy sé que no era…

Varios. Cuentos de amor.
Cuentos / marzo 25, 2022

Páginas de espuma, 2008. 250 páginas. Incluye los siguientes relatos: Silencio tan de Silvia, Carlos Castán El principio de la continuación, Antonio Alamo Cubriré de flores tu palidez, Eloy Tizón Copia en blanco y negro, Santiago Sylvester Gente extraña, Josan Hatero El amante de la capilla, Alfonso Cueto Autobús, Luis Mateo Diez La divina proporción, Esther Cross Eros bifronte, Rosa Chacel No, Antonio di Benedetto Conseja, Emilio S. Belaval Inevitable, Carmen Cecilia Suárez Pigmalión, Manuel Vázquez Montalbán Felicidad, Mercé Rodoreda ¿ Te gusta Brahms?, Linda Berrón Malentendidos, Adolfo Bioy Casares Jabón, Juan Carlos Onetti El cortejo secreto, Oscar Peyrou El noreste, Femando Quiñones Albina, Héctor Bianciotti Alrededor del amor porque el título no engaña, y aunque es el genérico de este tipo de antologías de Páginas de Espuma (Cuentos de…) en esta ocasión queda un poco cursi. También como en otras la calidad es bastante irregular. Frente a relatos magníficos como Cubriré de flores tu palidez de Tizón, excelentes como Copia en blanco y negro y Pigmalión hay muchos bastante mediocres -o que a mí no me han despertado ninguna emoción- y alguno realmente malo. Lo acabé, como siempre, por cabezonería, y por el efecto kinder sorpresa; a ver si…

Liliana Blum. Tristeza de los cítricos.
Cuentos / marzo 24, 2022

Páginas de espuma, 2019. 160 páginas. Incluye los siguientes cuentos: Conejillo de indias Luz de mi vida, fuego de mis entrañas Cactus Picota Una novia para Kafka Desnuda como un sándwich de carne Agua en los pulmones Madriguera El diablillo de la balsa Palabras bajo tierra Que no están mal, pero viniendo de Las voladoras me han sabido a poco. Mi preferido Luz de mi vida, fuego de mis entrañas, relación entre un padre que acaba de salir de la cárcel y su hija, bastante turbia. Otros no están mal, como Picota, Una novia para Kafka y Desnuda como un sándwich de carne, aunque me parece que en muchas ocasiones se queda en la anécdota de la historia sin ir más allá. Aunque son relatos crudos, no llegan a serlo tanto como los de Ojeda y -perdón por la opinión- están peor escritos tanto en el uso del lenguaje como en la estructura narrativa. Aquí han gustado más: Tristeza de los cítricos. Bueno. Su padre lanza un gruñido antes de darle un sorbo profundo a su botella; la cara de Ana se contrae en una sonrisita fugaz. -Siempre que se enoja con uno y lo bota dice: será un árbol…

Mónica Ojeda. Las voladoras.
Cuentos / marzo 22, 2022

Páginas de espuma, 2020, 2021. 124 páginas. Incluye los siguientes relatos: Las voladoras Sangre coagulada Cabeza voladora Caninos Slasher Soroche Terremoto El mundo de arriba y el mundo de abajo Cuyo resumen se explica bien en la contraportada: Criaturas que se suben a los tejados y alzan el vuelo, una adolescente apasionada por la sangre, una profesora que recoge la cabeza de la vecina en su jardín, una chica incapaz de separarse de la dentadura de su padre, dos gemelas rui-distas en un festival de música experimental, mujeres que se lanzan desde lo alto de una montaña, terremotos apocalípticos, un chamán que escribe un conjuro para revivir a su hija. Y todavía mejor donde me lo recomendaron: Las voladoras Cuentos crudísimos, como es marca de la casa de la autora. Magníficos Sangre coagulada, que como en otras ocasiones su lectura me ha puesto mal cuerpo y El mundo de arriba y el mundo de abajo que me ha resultado de una tristeza atroz. Muy destacables Las voladoras y Cabeza voladora. El resto bien. La habilidad de Mónica para crear imaginarios oscuros que mezclan un lenguaje poético con temas escabrosos es impresionante. Muy bueno. a ha degollado a una vaca, nunca…

Katya Adaui. Geografía de la oscuridad.
Cuentos / marzo 1, 2022

Páginas de espuma, 2021. 120 páginas. Incluye los siguientes cuentos: Los pulpos tienen tres corazones Por cosas de hombres no debes dejar de creer en Dios En lugar seguro Fiesta de guardar El que no está Correr El reino de lo impar Casas con cimientos en el río Un baño de oro Despiertos toda la noche Una lengua extranjera Los animales en los cuerpos de mis hijos Domingo No recuerdo haber encendido este cigarro Lagartijas Nosotros, los náufragos En su mayor parte relaciones de padres e hijos, construídos alrededor de ausencias y escritos en los huecos de lo que no se dice, con un lenguaje a veces casi telegráfico, siempre elíptico. En conjunto una sensación de tristeza y desasosiego que te arrastra como la resaca mar adentro. Mis preferidos los últimos. Muy bueno. Yo era pura experiencia corporal. Manifestaba. Fue mi tiempo de la doble vida, del doble tumo: tenía dos casas, dos habitaciones, dos camas, dos tipos de desayuno, sentado o a la carrera, dos rutas para ir a estudiar, una secundaria, dos adioses. Jamás he sido bueno con los números. Tampoco me dediqué. Me copiaba en los exámenes y respiraba con las justas. Me aterrorizaba imaginarlos como profesores…