Ed. Orbis, 1982. 395 pag. Tit. Or. Мертвые души. Trad. Teresa Suero. Picaresca rusa Efectivamente, no hay que juzgar a un libro por su cubierta. Sí, ya sé que como puede verse en la foto que está al lado este es un libro sin cubierta, vamos, sin imagen ni nada que prefigure el contenido. Pero el título me daba la impresión de que sería un mamotreto. Cuatrocientas páginas de novela inacabada. Totalmente cuesta arriba. Las almas muertas me sugerían algo soporífero. También tiene razón eso de que la ignorancia es bendita. El libro es excelente, claro, pero también es tremendamente divertido. Hacía tiempo que no me reía tanto -desde el último de Pratchett, para ser exactos. En una pequeña ciudad de rusia aparece un día Pavel Ivanovich Chichikov. Un caballero amable, que en pocos días consigue hacerse apreciar por todo el mundo, ser invitado en todas las casas, y estar presente en todas las conversaciones. Hasta que comienza su extraño negocio: comprar almas muertas. No quiero contar nada más para no revelar demasiado. Se dice que este libro es la primera novela moderna rusa. Que es el mejor del autor. Créanme cuando les digo que además se disfruta de su…