Cátedra, 2007. 646 páginas. Tit. or. The life and opinions of Tristram Shandy gentleman. Trad. José Antonio Lópeza de Letona. Cuando hablé en estas páginas sobre el Quijote ya avisaba de que no se podía decir nada nuevo, este es un caso parecido. Aunque no sea una novela tan conocida mucho se ha hablado sobre sus pirotecnias verbales y su construcción basada en meandros. La pongo bajo la categoría de novela aunque muchos hablan de antinovela. Bebe principalmente de dos fuentes, el Quijote y Gargantua y Pantagruel y aporta su propio estilo e invenciones. Se puede decir que es una parodia de las típicas novelas de personajes. Uno cree que leerá sobre la vida de Tristram Shandy pero descubre que el protagonista no nace hasta mediada la novela (y después no es que aparezca mucho más). La causa: el autor va acumulando disgresiones que nos apartan del camino principal (que realmente no existe) y así es difícil llegar a cualquier parte. Es admirable la libertad creadora que derrocha una novela tan antigua, y es que junto a las antes mencionadas acumulan más innovaciones estilísticas que todas las que vendrían después en el XIX, y marcan un camino que no empezó…