John Barth. El plantador de tabaco.
Novela / mayo 12, 2023

Sexto Piso, 2013. 1178 páginas. Tit. or. The sot-weed factor. Trad. Eduardo Lago. A finales del XVII el autoproclamado poeta Ebenezer Cooke es enviado por su padre a Maryland para hacerse cargo de una plantación de tabaco. Comienza una odisea llena de problemas y sin sabores en los que lucha por mantener una virginidad contra viento y marea. Su antiguo tutor, que está implicado en misteriosas conspiraciones guiará sus pasos, mientras que su criado, una especie de Sancho Panza, lo va metiendo en problemas. Todo mal. Empezando por la longitud excesiva, que como se dice en el prólogo es una descortesía para el lector. Se vende como una obra maestra del postmodernismo y yo digo ‘¿Dónde está, que no lo veo?’ Porque hacer un pastiche del estilo del XVII durante más de mil páginas más que una estructura original parece una broma pesada. Se vende como un homenaje al arte de contar historias, porque a cada paso los personajes narran aventuras o desgracias que les han sucedido. Totalmente a favor, que voy a decir yo que soy cuenta cuentos, pero que las historias sean interesantes. Prácticamente ninguna me ha despertado el interés. También se dice que la trama empieza normal…

John Barth. Perdido en la casa encantada.
Cuentos / noviembre 8, 2019

Edicions 62, 1988. 220 páginas. Tit. Or. Lost in the funhouse. Trad Toni Turull e Isabel Sancho. Selección de cuentos bastante inencontrable y cuya traducción debiera ser mejor ‘Perdido en la casa de la risa’ aunque entiendo que no tiene tanto gancho como el título que le han puesto. Hay algunos que comparten protagonista, un niño apocado y perdido en sus fantasías (y en casas encantadas) perseguido por abejas desde su niñez y con una madre peculiar. Otros parodian textos griegos, en algunos casos en un juego de espejos anidado como unas muñecas rusas. En general me ha dado la impresión de algo que dejo en los extractos: técnicas sofisticadas (y en algunos casos innecesariamente) para situaciones y personajes normales. Por momentos me ha resultado farragoso, pero hay algunos cuentos muy buenos (aunque incluso estos tienen exceso de sofisticación). Lectura interesante. Otra reseña: Perdido en la casa encantada No hay climax. ¿Se ha terminado la historia? No del todo. La historia de nuestra vidas. La última palabra en literatura, en realidad. Escojo la narración en primera persona para reflejar interés desde las peculiaridades de la técnica (tales como la normalmente insorportable consciencia de sí mismo, la abstracción y el vacío)…