Editorial Laetoli, 2006. 156 páginas. ¡Caña al mono! Imaginen que alguien les dice que la tierra es plana. Que el mito de Colón es una fábula, que lo de la gravedad es un invento de los científicos sin ninguna base y que las fotos de la tierra desde el espacio son un montaje. En defensa de su teoría sólo nos muestra algunos pasajes de la biblia. ¿Increíble, no? Sin embargo la Flat Earth Society sostuvo esas ideas hasta bien entrado el siglo XX. No nos hemos librado de teorías absurdas basadas en la interpretación de la biblia. En la actualidad todavía hay mucha gente que cree que animales y plantas fueron creados por un ser superior… y ahí está el libro del Génesis para probarlo. Ignorando la gran cantidad de pruebas que demuestran que la teoría de la evolución es verdadera se empeñan en defender lo indefendible con argumentos capciosos, tergiversaciones de la realidad, demagogia y mucho ruido. Hasta ahora pensaba que el creacionismo era algo típicamente estadounidense, pero no hace mucho desembarcaron los defensores del diseño inteligente en nuestras tierras. También en nuestro país hay mucha gente -hasta un 20% en extremadura- que cree que los seres humanos no…