Alpha Decay, 2009. 330 páginas. Tit. or. The contorsionist’s handbook. Trad. María Alonso Gómez. El protagonista de esta historia es un estafador capaz de elaborar un perfil falso con toda la documentación en regla, pero tiene un problema. De vez en cuando le dan unos ataques de dolor de cabeza tan brutales que se toma todo lo que se le pone por delante y pilla una sobredosis. En el hospital, para que no lo cataloguen como un suicida y lo internen en un psuquiátrico, tiene que tener la habilidad suficiente para engañar a los evaluadores. Tenía este libro en la mesilla de noche, sin abrir, preparado para su lectura cuando me atacó un virus intestinal que me hizo vomitar lo que no sabía que tenía dentro y encadené con una migraña terrible que apenas me permitió arrastrarme a urgencias. Allí me dieron algunos analgésicos que no cumplieron su misión porque yo, como el protagonista de la historia también he padecido dolores de cabeza que te dan ganas de arrancártela de cuajo. Era algo que tenía controlado desde hace tiempo y ha querido la casualidad que se alineara con la lectura. Dejando de lado anécdotas personales el libro se deja leer…