Seix Barral, 2013. 254 páginas. Nadie vio venir la crisis de la que todavía estamos sufriendo los efectos. Vivíamos en el país de la piruleta, todo iba bien, éramos una potencia mundial, pero teníamos los pies de barro. Y nos metimos la hostia. Este libro trata de lo que pasó antes de la crisis. Llegué a este libro con prejuicios encontrados. Gente de confianza me aseguraba que era muy bueno, duro retrato de una crítica económica y moral. Otros, también confiables, afirmaban que era basura. Después de leerlo, creo que los dos tienen razón, aunque tiro más bien a la segunda opción. Lo bueno: es realmente una descripción de lo que pasó en este país antes y después de la crisis. Aznar presumía de que ‘España va bien’ mientras alimentaba en el circuito de la corrupción a una burbuja inmobiliaria que explotó y nos dejó malheridos a todos. En el libro se describen los excesos de nuevos ricos en los que cayeron las instituciones culturales, el crecimiento de redes de clientelismo, el despilfarro sin sentido del dinero de todos y como se apartaron a personas honestas para poner a trepas sin escrúpulos. Lo malo: que es muy fácil decir esto…
RBA, 1995. 240 páginas. MI primer encuentro con Muñoz Molina no ha podido ser más agradable. Una novela negra bien contada sobre un antiguo capitán que debe ir a Madrid en la España de Franco para eliminar a un traidor de una red comunista, como ya hizo en el pasado. Pero los años no pasan en balde y el protagonista no es tan joven, la cosa se complicará y descubrirá que el príncipe de las tinieblas (Beltenebros) puede que no sea quien imagina. Me ha gustado la prosa, que es la que consigue que una historia que podría contarse en un relato alcance dimensiones de novela y, sin embargo, se lea con placer. No es raro que se haya hecho una adaptación al cine, donde supongo que se perderán las reflexiones del protagonista y, por supuesto, el estilo particular del texto. Tengo más libros del autor en la recámara. Bien. Calificación: Muy bueno. Un día, un libro (47/365) Vine a Madrid para matar a un hombre a quien no había visto nunca. Me dijeron su nombre, el auténtico, y también algunos de los nombres falsos que había usado a lo largo de su vida secreta, nombres en general irreales, como…
Leo en El País los siguientes artículos sobre Muñoz Molina: Muñoz Molina defiende la inspiración y la actitud del escritor principiante El extraño oficio de Antonio Muñoz Molina Y me viene a la memoria las conferencias que he escuchado de él en la fundación March y de que hace mucho tiempo que no cuelgo material de audio; ahora los fines de semana son para otros menesteres. Las conferencias las pueden encontrar aquí: Conferencias de Antonio Muñoz Molina El autor habla del oficio de escribir, cómo le viene la inspiración, el proceso desde la idea a la escritura. Me gustó la sencillez con que lo explicaba y se me quedó grabada una frase. Que los personajes hicieran cosas importantes no le costaba plasmarlo, pero las cosas sencillas eran dificilísimas: le costaba más sacar a los personajes de la habitación que sacarlos en brazos. A todo esto, todavía no he leído nada de él. Se admiten sugerencias.