Pedro Santana Martínez. Doce del quirófano y un ATS enamorado.
Cuentos / octubre 9, 2025

AMG, 1997. 84 páginas. Colección de 12 + 1 relatos, todos ellos menos el último casos con ecos de novela negra, pero con situaciones y resoluciones a pie de calle. Todo con su punto de desmadre y gamberrismo, como en el caso de la cabeza musical, donde un procedimiento para colocar cabello deriva en una capacidad para captar música cual si de radio FM se tratara. El sentido del humor funciona y yo, que esperaba alguna cosa tirando a cutre, me he encontrado riendo con más de una situación hilarante y sorprendente. Además de la calidad de los textos me he asombrado de que es una edición numerada de 1000 ejemplares de un editor modesto. Que tiempos aquellos en los que los libros modestos se sacaban de mil en mil. Bueno. — Tengo tendinitis en el codo. Es un fastidio que no se me va. Desde hace unos meses tengo codo de tenista. — ¡Pero si tú no juegas al tenis! — ¿Y qué? —saltó Mari Cruz— Eso no tiene que ver. — Por lo que me explicó el médico, se debe a la posición del antebrazo cuando utilizo el ordenador. Somos deportistas del ratón. — Seremos deportistas ratoneros. ¿Y…

Miguel Sánchez-Ostiz. Veleta de la curiosidad.
Ensayo / octubre 2, 2025

AMG editor, 1994. 98 páginas. Segundo premio café Bretón, es una recopilación de artículos, breves ensayos y reflexiones de diversos temas, mucho cine, lecturas, paseos por la ciudad, todo contado con un lenguaje comedido pero con tintes poéticos, un caminante que, como una veleta curiosa, va cambiando de dirección con entusiasmo. La lectura de estos libritos me dejan siempre la misma sensación. No son escritores famosos, no son obras maestras, ni nos pegan un hachazo en el alma ni nos proporcionan epifanías que nos cambian el rumbo de la vida. Son más bien conversar con un amigo tomando una copa de vino. Y eso, para mí, también tiene su encanto. Bueno. ¿Quién el que hizo decir de una prostituta de la época que por lo que a ella se refería cuanto antes viniera mejor? ¿Un miembro loco y oculto de la familia real cuyo nombre y existencia siempre quedó en la sombra, el mismo duque de Clarence -recuerdo los fotogramas de otra película en los que todo el misterio quedaba detrás de una ventana cerrada de un hipotético palacio de Buckingham-, sir William Gull, médico personal de la reina Victoria, un cirujano experto, agentes rusos, extranjeros, artistas necrófilos y maniacos…

Desidero Morga. Lunes de función pública.
Cuentos / abril 21, 2025

AMG, 2001.47 páginas. Ganadores del concurso de relatos del colegio de aparejadores que son los siguientes: Desiderio C. Morga, Lunes de función pública. Bruno Montané. Un trabajo en la frontera. Victoria Pérez Herreros. La boca del tiburón. Bastante bien escritos aunque tampoco emocionantes. El ganador tira un poquito del cliché del poeta que, caminando, contrapone lo cotidiano con la elevación espiritual pero acaba concluyendo que nadie es más que nadie. Está bien. Cruzo el puente camino de Correos, las berrañas están mustias de escarcha y el río me envuelve en su sonido antiguo. Siento tanta tristeza y desapego contemplando los barbos, los montes a lo lejos, que me reclino un poco en la baranda añorando la niñez que perdí río abajo. Al otro lado está la expansión dotacional y los servicios. Un amplio aparcamiento que sirve además para dar mercadillo los jueves. El parque infantil: columpios, toboganes de material homologado; alguna brecha verde a modo de parterre cuaresmal y arbolillos chaparros -aligustres, japónicas, boleanas- acordes con el mobiliario pétreo dispuesto por el Gabinete Técnico de Urbanismo y Gestión, antes Oficina de Obras. Un bulevar que agrupa una docena de bancos, el hotel y los bares selectos. En un viejo calvero…

Juan Manuel González Zapatero. El conferenciante mudo.
Cuentos / abril 16, 2025

AMG, 2002. 36 páginas. Segundo premio de un concurso de relatos, me ha resultado bastante insípido tanto el que da título al libro, que trata sobre una conferencia que paradójicamente aboga por darlas en unas condiciones un tanto extravagantes. Los dos restantes, El veneno de la escritura y Técnicas para ponerse a salvo, son bastante flojitos. Se deja leer. Que debe, lo antes posible, dividir al auditorio en dos bandos y atraer a su causa a una de las partes, a ser posible la que cuente en sus filas a los individuos más fornidos, que le servirán de parapeto para poder escapar (“Divide y vencerás”, “Difama que algo queda”, “Quien da primero da dos veces” son frases que atestiguan la importancia histórica de la estrategia). Que nunca podrá contar con las personas habituadas al escándalo, gente insolidaria y camorrista que no respeta nada. Y, finalmente, que no hay enemigo pequeño: hasta la anciana más inofensiva sabe abrir la caja de los truenos repitiendo, debido a una fingida sordera, una misma pregunta doce veces (y todas, por supuesto, conocen el manejo del bastón). Sin duda que toda buena conferencia consiste en un intercambio, ya de conocimientos, ya de léxico, ya de…

Roberto Iglesias. Revelación de la noche.
Poesía / febrero 3, 2025

AMG, 1995. 80 páginas. Poemario de Roberto Iglesias, fallecido hace cinco años y aunque natural de Mieres muy vinculado con La Rioja. Estos libritos son como los pimientos del padrón, que unos pican y otros non. Éste es de los que pican. De corte más bien tirando a clásico resultan sin embargo frescos en su lectura, con unas imágenes que nos hablan de amor y desamor, de soledad, de pérdida, que nos dice que Logroño ardía o que el corazón le dice que sonría y él no puede. Que éramos de fuego y hemos sido derrotados. Que las madrugadas están vacías. Ha sido toda una sorpresa. Muy bueno. XXX Sábado, 21. Sep. 91 – Lunes, 30. Sep. 91. Revelación de la noche heredada en soledad con aleteo de oscuros horizontes oxidados, remolinos hirvientes en las sombras de mi sombra, un habitante de la ciudad solo y persistente salta de la pirámide alumbrada hacia el abismo, tiniebla soberana que me eleva como un pájaro de solitario vuelo, oscuridades incendiadas, alas de sombra que se extienden claras y purísimas, revelación de la noche heredada en soledad como tu carne, cielo mío. Tiemblo de tu amor, cuando anochece y alumbran los besos la…