Almadía, 2012. 272 páginas. Colección de 13 explicaciones ensayos sobre diferentes temas, habitualmente relacionados con el yo y la cotidianeidad. Más poéticos -en ocasiones indistinguibles de un relato- que eruditos, pero con la profundidad suficiente para hacernos reflexionar. La mitad me han gustado mucho, especialmente los que tocan temas autobiográficos. La otra mitad me ha dejado completamente indiferente, sobre todo algunos del principio. En conjunto una buena lectura. […]Puedo vislumbrar a mi madre en algún día desesperado, pilas de ropa para planchar, camas deshechas, la cocina repleta de trastes sucios, reclamándose: «Cómo me metí en esto», y barajando las etapas de su vida hasta ese instante en que nació la primera hija y todo pareció acontecer anónimamente, ya no a ella sino a una mujer ataviada de mamá. La puedo presentir arrepentida cuatro hijos después, a pesar del amor absoluto y célebremente incondicional, con los planes ya en transición hacia la añoranza. La puedo ver fija en alguna ensoñación donde ella no se pospuso indefinidamente, como si hubiera espacio después para retomar las zonas truncas o parasitadas por la maternidad. ¿Dónde queda uno mismo en todo eso? Raymond Carver, en su ensayo «Incendios», confesó que la influencia principal en su…