Gustavo Nielsen. La fe ciega.
Cuentos / febrero 14, 2020

Páginas de espuma, 2008. 140 páginas. Incluye los siguientes relatos: Adios, Bob La vida cantada La fe ciega Redención Turf Aniquilación de un poema El café de los micros. Los más divertidos, por su aire paródico de mala leche escritores son La vida cantada, programa radiofónico que pondrá frente a frente a dos escritoras que entienden de manera diferente la poesía y Aniquilación de un poema, la dificultad de mantener la amistad cuando las valoraciones de textos se meten por medio. El primer relato está bien escrito pero el final me resultó insufrible. La oscuridad de La fe ciega, que da título al libro me gustó mucho más. Aunque el más sólido sea, seguramente, El café de los micros, un viaje en coche de un padre y un hijo que se complicará por un encuentro en la carretera. Apenas hay reseñas en la red, aquí una: La fe ciega. Recomendable.

Juan Bonilla. Una manada de ñus.
Cuentos / febrero 13, 2020

Pre-textos, 2013. 270 páginas. Incluye los siguientes relatos: Había una manera Cuidados paliativos Brooke Shields Sólo tienes que resistir hasta mañana El sol de Andalucía embotellado El llanto Justicia poética Tú sigue por donde vas, que no vas a ninguna parte Ya sé que nadie va a creerme, pero sucedió así Subasta holandesa Que comparten la aparición de esa manada de ñus que en los documentales cruzan un río y algunos son devorados para que sobreviva la manada, aunque no sea metáfora de nada. El protagonista en algunos casos también parece ser el mismo o ha pasado por cosas similares y se adivina ficcionado un trasunto del autor. En Cuidados paliativos los últimos días de la muerte de una madre coinciden con el fin de una relación y en El sol de Andalucía embotellado el protagonista es un escritor cuya madre también tuvo cáncer. Cuidados paliativos y Brooke Shields me han gustado por cómo apela a lo emotivo con el punto justo para no pasarse a lo ñoño y sin embargo tocar la fibra. Justicia poética es posiblemente el más original de un conjunto en el que los temas se apegan a lo cotidiano. Una antología solvente pero para mi…

Lola Sanabria. Partículas en suspensión.
Cuentos / febrero 12, 2020

Talentura, 2013. 140 páginas. No pongo la habitual lista porque al tratarse de microrrelatos hay demasiados como para nombrarlos a todos. Historias solventes, correctamente escritas, con los habituales giros del género pero, por desgracia, también con algunos tics del mismo. Hay algunos muy buenos (dejo muestra) y otros bastante olvidables. En conjunto, bien. Aquí hay dos reseñas excesivamente elogiosas: Partículas en suspensión y Partículas en suspensión. Recomendable. Ganar el cielo «Dios olvidó cerrar la puerta de atrás del infierno», sentenciaba mi madre; y añadía que entre nosotros vivían las criaturas malignas que habían escapado. Se colocaba las gafas sobre la punta de la nariz, esparcía las lentejas en el hule de la mesa y mientras separábamos las que tenían bicho de las sanas, me hablaba de las avispas, a las que quemaba vivas con trapos empapados en alcohol, de las ratas a las que exterminaba con veneno. Terminaba con mi padre. Decía que se vio obligada a internarlo en un sanatorio. Levantaba los ojos a las moscas agonizantes, con las patas pegadas a los tirabuzones de miel que colgaban del techo, y suspiraba. «Tengo medio cielo ganado con él». Medio cielo era poco. Por eso, cuando la embolia la incapacitó,…

Isabel González. Casi tan salvaje.
Cuentos / febrero 11, 2020

Páginas de espuma, 2012. 152 páginas. Incluye los siguientes relatos: No es amor lo que se pide El establo Material a aportar por el alumno: gomaespuma para prótesis y deformidades Monoteísmo Por el este y en el oeste Cuna Líneas Lo normal La mujer inolvidable Trasplante. Una dirección Casi tan salvaje . Buena Deja todo como lo encuentres.. Mi vuelta al mundo Pirarucú . La duda Magnolios Decexo Diminutivo La tierra es el cielo de los pájaros En los que el lenguaje predomina sobre la trama, a veces inexistente. En algunos cuentos esto juega en su favor, en otros en su contra. Paisajes emocionales dibujados con un lenguaje a medio camino entre la concisión y la poesía. Entornos oscuros y crudos como Una dirección o heridas abiertas como en Magnolios. Seguramente me lo recomendaron aquí: Casi tan salvaje y ha sido una buena recomendación. Muy sabroso. -Gracias -contestó la camarera exagerando las erres y la modestia. Resultaba evidente que ella era la autora, pero la mujer quería oírlo de su boca. Obligarle a pronunciarlo. Tenía la costumbre de procurar felicidad. -¿Lo ha hecho usted? -le preguntó. Los congresistas pidieron la cuenta y la camarera se retiró a buscar la factura…

Arkadi y Boris Strugatski. Destinos truncados.
Ci-Fi / febrero 10, 2020

Gigamesh, 2003. 320 páginas. Tit. or. Jromaya sud’ba. Trad. Justo E. Vasco. Articulado en dos tramas, un relato interno con más aires de ciencia ficción donde un escritor se va enterando de lo que existe en realidad detrás de los gafudos que sufren una enfermedad parecida a la lepra y parecen estar convirtiendo a los jóvenes de la ciudad en algo más grande. Y un relato externo sobre las tribulaciones de un escritor con la burocracia y una máquina que es capaz de predecir el número de lectores que tendrá una obra. Para decirlo corto: aquí ciencia ficción poca y tangencial. Pero para decirlo claro: esto es una obra como la copa de un pino que se disfruta por el lenguaje, por esos diálogos entrecortados, por un ambiente que en cada página parece la descripción de un sueño. Las tribulaciones del escritor del relato externo, escondiendo su carpeta azul, su obra preferida que nunca muestra, que malvive de reseñas y minucias y del éxito de sus ‘Cuentos infantiles modernos’, cercanos a un Bradbury que no había leído. Y las andanzas del escritor del relato interno, defendiendo la justicia caiga quien caiga, aunque no sea devoto de la religión del futuro…