Frank Wedekind. El despertar de la primavera.
Teatro / enero 6, 2015

Edicions de 1984, 1986. 112 páginas. Tit. Or. Frühlings Erwachen. Trad. Carme Serrallonga. Ignoraba por completo la obra de Wedekind, y me ha sorprendido lo moderna que es esta obra, que en su momento fue un escándalo por retratar, si bien con un estilo poético, la sexualidad adolescente. Todos los personajes tienen una relación especial con el sexo: Melchor, que vive atormentado por su ignorancia respecto de la sexualidad; Wendla, la protagonista femenina, que instiga a su madre acerca de los secretos de la concepción y el mundo de los adultos; Mauricio, sometido a una inmensa presión para alcanzar el nivel de un alumno aplicado, aprobar sus exámenes y mantener su lugar en el Liceo; Martha, quien no puede escapar de los abusos físicos de su padre… La obra, además de adelantarse mucho a su tiempo, ha sido pasto de los psicoanalistas, ávidos de cualquier cosa que huela a sexo. Creo que no hace falta cargar la obra con mucha interpretación, lo que cuenta se explica bastante bien, con una prosa exquisita, que todavía hoy logra conmovernos. Siento no haberla conocido antes. Sólo he encontrado esta reseña, en catalán: El despertar de la primavera’ de Frank Wedekind. Calificación: Muy buena….

Leonie Swann. Las ovejas de Glennkill.
Novela / enero 6, 2015

Salamandra, 2007. 318 páginas. Tit. Or. Glenkill. Trad. María José Díez y Diego Friera. Me vino recomendado de varias fuentes, pero que estuviera editado por Salamandra de daba repeluco. Que publican cada libro ñoño que tira p’atrás. Me alegro de haberme animado. Estamos ante una novela de misterio: un pastor es asesinado en pleno campo con una pala. Pero sus ovejas, inteligentes y curiosas, entrenadas por largas sesiones de lectura que el pastor les ofrecía por las tardes, decidirán descubrir quien ha sido el asesino. Se inicia así una peripecia en la que descubrirán la verdad y, de paso, aprenderán mucho sobre si mismas. El libro es una delicia. Entretenido, original, nada pasteloso. Además -y esto es lo que más me ha gustado- la autora se descuelga aquí y allá con algunas páginas de exquisita prosa. La historia bien hilvanada, pese a la dificultad de hacer avanzar la trama a ritmo de oveja. Repleto de guiños, empezando por el nombre de la oveja que lidera la investigación. Aire fresco y de calidad, entretenimiento que desatasca el cerebro sin estropearlo. Otras reseñas: [Lectura para el Verano] ‘Las ovejas de Glennkill’, de Leonie Swann, Las ovejas de Glennkill, Leonie Swann y Reseña:…