El éxito ajeno
Noticias / febrero 20, 2014

LLevo ya casi 10 años opinando en este cuchitril sobre los libros que leo. Aquí aterriza gente de todo pelaje que, supongo, unas veces coincidiran con mi criterio y otras no. Las reacciones son de dos tipos: – Hablo mal de un libro que al visitante le ha gustado En estos casos la entrada se llena de comentarios defendiendo las bondades del libro y criticando mi dudoso gusto y escasa inteligencia. Si ponen a parir algo que te gusta están cuestionando tu juicio y te toca defender no tanto al autor como a ti mismo. Las reseñas desfavorables son las más comentadas. – Hablo bien de un libro que al visitante no le ha gustado A los ojos del visitante el que tiene mal gusto soy yo, y salvo alguna sonrisa de suficiencia no hay motivos para entrar a comentar. Salvo dos excepciones: cuando el que entra es un amigo/conocido y en el caso de ser un escritor patrio que está empezando. Ya lo decía Anne Lamott: De todas las voces que oigas en Radio Malaonda, la más difícil de sojuzgar será la de los celos. Los celos son un ataque en toda línea a cualquier contingente de confianza que…