Max Aub. Crímenes ejemplares.
Cuentos / mayo 31, 2016

Media Vaca, 2006. 140 páginas. Es posible que Max Aub fuera más inteligente que talentoso, y más periodista que escritor. Pero su obra tiene una calidad innegable y una legión de fieles lectores entre los que me incluyo. Estos crímenes, bellamente ilustrados, son una pequeña joya que nunca me canso de leer. Verdadera precursora de los microrrelatos antes de la explosión del género. Me quemó, duro, con su cigarrillo. Yo no digo que lo hiciera con mala intención. Pero el dolor es el mismo. Me quemó, me dolió, me cegué, lo maté. No tuve -yo, tampoco- intención de hacerlo. Pero tenía aquella botella a mano.

Felipe R. Navarro. Hombres felices.
Cuentos / mayo 30, 2016

Páginas de espuma, 2016. 118 páginas. Incluye los siguientes relatos: Soy el lugar Orígenes del turismo Un modelo Argos Apuntes para una celebración El orden lógico de las cosas Amarillo limón Tomás Rodaja se contempla, desnudo Impermanencia Siempre hay un momento en que un escritor escribe un cuento como este, porque todos los escritores se ven zarandeados en algún momento por una guerra o una crisis; o por ambas Óxido Notas para un debate sobre la arquitectura de interiores Tarde de circo Simplemente Jorge La modificación sustancial de las condiciones de trabajo Te diré cómo lo haremos Let’s talk about the weather ¿Hacia dónde abre esta ventana El orden lógico de las cosas En la contraportada se hace hincapié en la voz original del autor, que incorpora al relato elementos metanarrativos que les dan un sabor especial, aunque a veces sean más efectistas que efectivos. Pero en ocasiones (pienso en ‘Let’s talk about time’, hay otros) el saltador, después de una impresionante pirueta, hace una entrada impecable en el agua, y el espectador no puede evitar levantarse del asiento y aplaudir, con ganas. Un hombre arranca veloz. Atraviesa llanuras, valles, colinas, desiertos de varias temperaturas, colores que van del blanco…

La carbonería
Audiovisual / mayo 28, 2016

Proceso de pintado de la hermosa fachada del edificio ocupado ‘La Carbonería’ Por desgracia fueron desalojados; estuve presente y el despliegue policial era aterrador. No tuve valor de sacar fotos. Según dicen en la siguiente noticia fueron 300 los policías que participaron: http://www.elperiodico.com/es/noticias/barcelona/empieza-desalojo-del-centro-okupa-carboneria-3117238

Samanta Schweblin. Siete casas vacías.
Cuentos / mayo 27, 2016

Páginas de espuma, 2015. 124 páginas. Se incluyen los siguientes cuentos: Nada de todo esto Mis padres y mis hijos Pasa siempre en esta casa La respiración cavernaria Cuarenta centímetros cuadrados. Un hombre sin suerte Salir Me ha gustado bastante menos que su otro libro de relatos ‘Pájaros en la boca’, hay menos variedad temática y estilística. Pero cuentos como ‘La respiración cavernaria’ y ‘Un hombre sin suerte’ elevan el nivel del libro. El primero, aunque me resultó un poco largo, dibuja una situación asfixiante. El segundo, que ganó otro premio y se ha colado aquí como de casualidad, es realmente grande. De los que quedan en la memoria. Y quizá lo hice a propósito, así lo sentí en ese momento: los ojos se me llenaron de lágrimas. Entonces él me abrazó, fue un movimiento muy rápido, cruzó sus brazos sobre mi espalda y me apretó tan fuerte que la cara me quedó hundida en su pecho. Después me soltó, sacó su revista y su lápiz, escribió algo en el margen derecho de la tapa, lo arrancó y lo dobló tres veces antes de dármelo. -No lo leas -dijo, se incorporó y me empujó suavemente hacia los cambiadores. Dejé pasar…

Óscar Esquivias. Andarás por el mundo.
Cuentos / mayo 26, 2016

Ediciones del viento, 2016. 244 páginas. Se incluyen los relatos siguientes: Todo un mundo lejano Curso de natación El Chino de Cuatroca La Florida El joven de Gorea El príncipe Hamlet de Mtsensk Los chinos Temblad, filisteos La última víctima de Trafalgar La casa de las mimosas Mambo El mejor de los mundos El misterio de la Encarnación El arpa eólica Esperaba más de este libro de relatos. Escritos con buen oficio y maestría en el retrato carecen en su mayor parte de chispa e incluso de dirección. Lo salvan los dos o tres buenos -como La casa de las mimosas- pero el resto son perfectamente prescindibles. Un ejemplo -con spoilers- en ‘El Chino de Cuatroca’ nos plantea una historia muy bien dibujada, hijo de inmigrantes que se va de casa y vive en condiciones miserables malviviendo. Un retrato perfecto, personajes bien dibujados (incluso los secundarios). Para al final contar una anécdota, casi un chiste, sobre hacerse pasar por chino dado su parecido con esa etnia. ¿Hacía falta tanto ropaje para algo tan baladí? No obstante, se deja leer. No puedo explicar qué fue lo que sucedió después. Sé que desde el primer momento lo que vi en la pantalla…