Lo apolíneo y lo dionisíaco
Sin categoría / septiembre 20, 2007

Cuando tu provincia es una de las grandes productoras de vino del mundo, está claro quien gana el enfrentamiento entre Apolo y Dionisio. Los riojanos seguimos rindiendo culto pagano al dios del vino y del cachondeo (y, se lo aseguro, no es un mal dios, excepto para conducir). La prueba está en las batallas del vino, donde todo el mundo acaba bañado en tan preciado néctar. La más famosa es la batalla del vino de Haro, que tiene entrada en la wikipedia y hasta un juego en internet. Pero existe también en el pueblo de San Asensio una Batalla del clarete, menos conocida pero no por eso menos divertida. Unos 40.000 litros de vino son donados por cooperativas para que la gente utilice todo tipo de recipientes y pistolas de agua reconvertidas para remojar al vecino. No se alarmen por el dispendio: es vino de baja calidad y rebajado. En el periódico La Rioja tienen un reportaje fotográfico para que se hagan una idea. Me permito -si no me abroncan- rescatar esta foto: A ese señor que empuña con cara de pocos amigos el cubo un servidor le debe mucho. Si en esta entrada explicaba la causa de mi gusto…